Dúo Pimpinela: Feijóo busca la foto con Ayuso para transmitir unidad mientras el PP se frena en las encuestas
Sus encuentros públicos han sido habituales y siempre en un clima de cordialidad e incluso mucha complicidad, aunque Ayuso siga comportándose como un verso suelto
El objetivo es transmitir unidad y fortaleza. Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso volverán a coincidir este lunes en un acto sobre jóvenes en el Matadero de Madrid. El líder de la oposición y la presidenta de la Comunidad se citan para escuchar juntos “los principales problemas” que afectan a la juventud de cara a las elecciones municipales y autonómicas del próximo mes de mayo.
En ‘Génova’ son conscientes de que Ayuso es su gran baza para captar voto juvenil, ya que su candidatura logró pescar voto joven en el granero electoral de otros partidos en la convocatoria autonómica de 2021. De hecho, Ayuso ya ha hecho guiños como su ‘Plan Solución Joven’ con el que pretende movilizar suelo público para que menores de 35 años accedan a un alquiler de menos de 600 euros o facilitar el acceso a la compra de una vivienda sufragando hasta el 95% de la hipoteca de su primer hogar.
Los encuentros públicos de Feijóo y Ayuso desde que el gallego asumió la presidencia del PP han sido habituales y siempre en un clima de cordialidad e incluso mucha complicidad. Nada que ver con los últimos meses de la era Casado, donde ambos estuvieron hasta varias semanas cruzando agendas para evitar encontrarse en algún acto.
En la nueva era del PP, Feijóo y Ayuso quieren cerrar fisuras y aparentar que las crisis internas en el partido son cosas del pasado. La presidenta madrileña no tiene reparo en mostrar su aparente buena sintonía con el gallego, aunque siga siendo un verso suelto dentro de las filas. No dudó, recientemente, en criticar los impuestos a las eléctricas que perfila la UE horas después de que Feijóo diera su apoyo o en azuzar la polémica por la renovación del CGPJ cuando la consigna de Moncloa y PP era no caldear el ambiente para lograr el pacto. “Me preocupa que el Poder Judicial se llene de Tezanos disfrazados de jueces (...) Sánchez no es de fiar”, dijo Ayuso en un evento mientras González Pons y Bolaños extreman sus posturas para romper el bloqueo en el órgano de gobierno de los jueces desde hace más de cuatro años. Unas semanas antes, también anunció por su cuenta un recurso de inconstitucionalidad contra el decreto de ahorro energético del Gobierno, algo que nadie más en el PP había planteado y que a nivel nacional sólo Vox se había atrevido a decir. De momento, Feijóo reacciona a este tipo de provocaciones con indiferencia y evita cualquier confrontación con ella.
El ‘efecto Feijóo’ se consume y Ayuso sigue disparada
Su último acto juntos hasta el de este lunes fue el pasado 2 de septiembre, con motivo del inicio del curso político. En aquel encuentro, Feijóo no perdió tiempo en hacer equipo con Ayuso. “Que digan de manera insistente que Isabel y yo somos muy distintos, acredita que tenemos algo que nos hace muy parecidos: los dos ponemos muy nervioso al Gobierno de Sánchez. Eso da mucha unidad. Y eso se acredita en la intensidad y frecuencia con la que nos insultan (...) Me hace cierta gracia que cuando el PP va bien alguien se invente discrepancias y disputas. Lo cual, cuantas más inventen es que el PP va mejor”, dijo. Un día antes, ambos cenaron juntos en la taberna Casa Maravillas de Madrid sin asesores ni personal de confianza. Solos, sí, pero con medios gráficos preparados para inmortalizar la velada.
Y es que desde aquel famoso abrazo en el congreso extraordinario que aupó a Feijóo a la presidencia del PP, el gallego sabe que las imágenes hablan más que las palabras. Por este motivo elude cualquier fotografía junto a Santiago Abascal, pero sí echa mano de Ayuso para reforzar su liderazgo una vez que las encuestas comienzan a señalar que el ‘efecto Feijóo’ se apaga. Mientras, Ayuso sigue disparada y los sondeos apuntan a que la líder madrileña podría incluso alcanzar la mayoría absoluta que por un par de escaños se le escapó hace año y medio. Su plan es mantenerse una legislatura más, pero descarta después el salto a la Moncloa. “Madrid es mi comienzo y final”, ha dicho en reiteradas ocasiones. Pero Feijóo, viendo los antecedentes, prefiere mantenerse vigilante ante sus pasos. Ya se sabe: mantén a tus amigos cerca, pero a tus enemigos aún más cerca.
