"¡Te la puedes poner en el coño!": Vergonzosa discusión por las mascarillas en el Metro de Madrid
De esta saldremos mejores.
Lo paramos unidos. De esta saldremos mejores. Y un largo etcétera de eslóganes que cada día se van por el sumidero cuando vemos escenas como la que ha grabado este domingo la periodista Esther Yáñez en el Metro de Madrid.
Todo ha ocurrido en un vagón de la Línea 5 entre una joven negra y un hombre mayor que se encontraba sentado, junto a su mujer, frente a ella.
Como vemos en el vídeo, de apenas un minuto, el hombre recrimina a gritos a la chica que no se tapa la nariz. ”¡Tápese la nariz, gilipollas de mierda!”, le espeta.
″¡Déjeme en paz, que tengo la mascarilla puesta!”, contesta la joven, subiéndose la mascarilla.
El hombre se levanta un momento y le vuelve a gritar: ”¡Que se tape la nariz!”.
″¡Que tengo la mascarilla puesta!”, contesta ella.
″¡Que te tapes la nariz, coño!”, insiste el señor.
“Racista, que eso es lo que es, un racista”, dice entonces la chica.
″¡Nooo!”, reacciona la mujer del hombre, que mantiene una conversación que apenas se puede oír con la joven.
″¡Tápese la nariz, coño!”, vuelve a gritar el hombre. ”¡No me da la gana!”, contesta ella. ”¡Eres gilipollas y estás jodiendo a todos!”, responde él.
Entonces se mete otro viajero en la conversación, que le da “la razón” al señor.
″¡Pero que llevo la mascarilla desde que entré!”, se explica la joven.
″¡Te la puedes poner en el coño!”, contesta con muy malas maneras el hombre.
Frase que no debió de escuchar la chica, que seguía explicando al otro viajero que el hombre le había llamado “gilipollas” e “hija de puta”.
″¿Qué hija de puta? ¡Hija de puta es usted!”, contesta el señor. ”¡Usted, usted, usted!”, responde la joven.
″¡Tápese la nariz, cerda!”, insiste el señor, que cada vez usaba un adjetivo distinto. ”¡Cerda tu madre, que estoy harta ya de tanto insulto!”, contestó ella. ”¡Tu puta madre!”, siguió el señor.
Yáñez, que ha tildado lo sucedido de “escena lamentable” y de “esperpento sin sentido por ambas partes”, ha dejado la siguiente reflexión tras lo vivido: