Occidente condena la matanza de Bucha y prepara graves sanciones mientras Rusia habla de "montaje"

Diario de guerra, día 40. El mundo sigue impactado, sin palabras. Las imágenes de la matanza de Bucha, a las afueras de Kiev, durante la retirada de las tropas rusas de la capital han indignado a la comunidad internacional que ha visto más de cerca el horror de la guerra. Al menos 400 personas han sido asesinadas y ahora sus cuerpos se agolpan en fosas comunes mientras recogen más cadáveres de las calles.

Incluso se investiga si algunas de ellas han sufrido torturas durante algunos interrogatorios en un posible sótano donde han aparecido unos cinco cadáveres. Occidente no ha tardado en responder ante la dureza de las imágenes y sobre todo la inalteración del Kremlin que niega los hechos y habla de “montaje”. “A nosotros nos interesa más que nada cómo ve la situación y cualquier otra, el pueblo ruso. Cómo entiende las misiones que cumplen nuestras Fuerzas Armadas. Y él (el pueblo ruso) entiende estas misiones”, ha asegurado Serguéi Lavrov.

En el ambiente ya suenan con más fuerza palabras como “crímenes de guerra” o “genocidio”. Organizaciones como Amnistía Internacional piden que se investigue hasta el final y se juzgue a los responsables. El mismo discurso que ha seguido Zelenski que ha abandonado Kiev para conocer in situ la escena del crimen. “Haremos que los responsables sean castigados”, ha adelantado.

¿Quiénes son señalados de la masacre?

La investigación ya empieza a destapar varios nombres. La inteligencia militar ucraniana ha difundido en su página web los datos personales de 1.600 soldados rusos, desde nombre y apellidos a fecha de nacimiento y rango militar, integrados en las tropas que actuaron en Bucha.

La lista corresponde a los integrantes de la 64 Brigada Independiente Motorizada del Ejército ruso, que estaría implicada en la presunta matanza de civiles en esa ciudad.

¿Cuál ha sido la respuesta de EEUU?

Joe Biden ha sido claro y se ha reafirmado en lo que ya dijo hace unas semanas y por lo que recibió críticas después de llamar a Putin “criminal de guerra” y pide llevarlo a un tribunal. “Tenemos que conseguir todos los detalles para que pueda haber un juicio por crímenes de guerra”, ha expresado.

Desde la Casa Blanca se han anunciado nuevas sanciones tras conocer lo sucedido en Bucha que se darán a conocer esta semana.

Además, EEUU ha hecho movimientos a través de su embajadora en Naciones Unidas, donde ha impulsado la suspensión de Rusia del Consejo de Seguridad.

En respuesta, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, le ha recordado las guerras de Irak, Libia y Siria. “Esto demuestra que muchos políticos estadounidenses que estuvieron en los orígenes de la guerra de Irak por motivos bien conocidos, que desintegraron Libia con sus socios de la OTAN, que invadieron Siria, esos políticos no están del todo bien de conciencia”, dijo Lavrov durante una rueda de prensa.

¿Y Europa?

La Unión Europea también ha anunciado un quinto paquete de sanciones contra Rusia urgente. Esta vez, más cerca el debate energético para aislar a Rusia aunque los estados miembro están divididos. Para evitar el desabastecimiento, Alemania ya ha nacionalizado la filial de Gazprom. Sin embargo, el detalle de las medidas se conocerá el miércoles.

Además, en varios países ya han empezado a tomar medidas contra diplomáticos rusos. Es el caso de Lituania, que ha expulsado al embajador ruso en su país y en Alemania ha expulsado a 40 diplomáticos. En España, en cambio, Albares no ha confirmado esta medida aunque ha apuntado que “las mismas reflexiones” de los socios se plantean también en el país.

¿Qué pasa con las negociaciones?

El jefe humanitario de la ONU, Martin Griffiths, se ha reunido en Moscú con altos cargos del Gobierno ruso para tratar de impulsar una tregua humanitaria en Ucrania, unos contactos que la organización describió este lunes como “productivos” y que ahora continuarán con las autoridades de Kiev.

Haq dijo que los contactos fueron “productivos”, pero no ofreció ningún detalle a la espera de que Griffiths traslade los resultados al secretario general de la organización, António Guterres, que fue quien le encomendó esta misión de mediación.

¿Cómo evoluciona Kiev?

Las tropas rusas han abandonado los alrededores de la ciudad, aunque muchos de sus vecinos aún viven bajo tierra para protegerse de futuros ataques. La estrategia del Kremlin ya no es ocupar todo el país, sino centrarse en la región sudeste.

Aún así, el alcalde de la capital ha pedido a la población que no vuelvan aún a la ciudad.

¿Avanzan los corredores humanitarios?

El Ministerio de Defensa ruso ha vuelto a proponer un paso seguro en Mariupol para evacuar a los combatientes que sigan en la ciudad. La propuesta incluye a las unidades de las Fuerzas Armadas, los batallones de defensa territorial y los mercenarios extranjeros.

De esta forma, el Ejército ruso está dispuesto a declarar un alto el fuego a las 09:30 del martes “exclusivamente por motivos humanitarios” y hacia la región de Zaporiya. De las 10:00 a las 13:00 los combatientes ucranianos deben abandonar la ciudad en dirección a la localidad de Mangusha “sin armas ni municiones”.

Se calcula que más de 130.000 personas continúan aún en la ciudad. No obstante, Rusia también se ha abierto a permitir la llegada de buques para la evacuación de civiles por mar.