Rusia busca su nueva Mariúpol
Moscú concentra todos sus esfuerzos en el Donbás arrasando con intensos ataques el área de Lugansk. Además, las tropas aíslan nuevas ciudades aprovechando el temor reciente de la ciudad portuaria.
Diario de guerra, día 91. La invasión no se detiene, sino al contrario, y Rusia concentra todos sus esfuerzos en el Donbás. Tras Mariúpol, el Kremlin tiene un nuevo objetivo: Severodonestk. Según el gobernador de Luganks, la están tratando “borrar de la faz de la tierra”. Mientras en la ciudad continúan unos 10.000 civiles que con la intensidad de los ataques está siendo complicado evacuar.
Por el momento, las tropas ucranianas resisten en los diferentes frentes aunque en algunos puntos han tenido que retroceder. La estrategia ahora es aguantar hasta el fin de semana, cuando los rusos se canse y así estabilizar la situación en la zona.
El propio Zelenski ha insistido en que Rusia quiere destruirlo todo y que la situación empeora a cada hora. Además en sus intervenciones en Davos ha insistido en pedir más ayuda a Ucrania y que los países endurezcan sus sanciones contra Rusia.
¿Habrá una segunda Mariúpol?
Las fuerzas rusas van con todo en el Donbás y están aislando diferentes urbes, del mismo modo que hicieron con Mariúpol durante dos meses. Severodonestk no es la única. También están cercadas las localidades de Zolotoye e Hirske.
La guerra entra así en una nueva fase que será decisiva para su avance y que Kiev reconoce como “complicada”. “Dependiendo de los resultados de la gran batalla por el Donbás, se podrá decir a dónde vamos”, ha indicado el asesor del Ministerio del Interior, Vadym Denysenko.
¿Cuál ha sido el saldo del asedio a Mariúpol?
Durante semanas, la ciudad portuaria ha centrado la guerra, principalmente después de que Moscú no pudiera con Kiev. Este miércoles, las autoridades locales han calculado que el asedio continuo ha supuesto la muerte de 22.000 civiles.
¿Cómo evoluciona Putin?
Por primera vez desde el inicio de la invasión, el presidente ruso ha dejado imágenes históricas en su visita a un hospital que atiende a heridas de guerra. Además, ha creado una ley para levantar el tope de edad para alistarse en el Ejército, que estaba en los 40 años.
Desde el Kremlin se insiste en usar el hambre como arma de guerra, como ya denunciaba la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. En su última propuesta, Putin se abre a dejar salir los barcos de los puertos ucranianos a cambio de que Occidente levante las sanciones.
¿Cómo avanzan Suecia y Finlandia?
Las delegaciones de ambos países nórdicos han viajado a Ankara para intentar suavizar el no rotundo de Turquía a su adhesión a la OTAN. En el inicio del encuentro a tres bandas se contempla que sean difíciles pero no imposibles. Sobre todo después de que el presidente turco haya empezado a matizar su postura.