Deja que los niños estén con sus abuelos, aprenderán a no discriminar
Escrito por Annamarya Scaccia.
Es un hecho inherente a la vida que todo el mundo envejece y que todos queremos vivir para llegar a la vejez, pero, tristemente, la edad avanzada a menudo suscita críticas en lugar de respeto: la gente joven presta menos atención a lo que tienen que decir las personas mayores o se mofa de que son demasiado viejos "para entender la cultura popular".
El edadismo (los prejuicios contra las personas mayores) no benefician a nadie, pero un nuevo estudio muestra que se puede prevenir fomentando relaciones positivas entre los niños y sus abuelos.
El estudio, publicado en la revista especializada Child Development, revela que los niños que mantienen una buena relación con sus abuelos son menos proclives a incurrir en sesgos de edad hacia los mayores.
Para realizar el estudio, los investigadores solicitaron a 1.151 niños belgas de entre 7 y 16 años que describieran lo que opinaban de sus abuelos. Descubrieron que quienes no tenían una relación feliz con sus abuelos eran más propensos a adoptar una perspectiva edadista.
"El factor más importante asociado a los estereotipos edadistas fue la baja calidad de contacto con los abuelos", resumió en una rueda de prensa Allison Flamion, autora principal del estudio y estudiante de posgrado de Psicología en la Universidad de Lieja (Bélgica). "En lo que respecta a las ideas edadistas, hemos hallado que la calidad del contacto importa mucho más que la frecuencia".
Dicho de otra manera: que los abuelos pueden ayudar a moldear la forma en que sus nietos perciben el envejecimiento.
Pero no solo depende de la calidad de la relación, sino también de la percepción que tengan los pequeños de sus abuelos. En concreto, según los investigadores, los niños que tenían abuelos con mala salud eran más propensos a desarrollar prejuicios contra las personas mayores que los niños con abuelos sanos. Resulta interesante que los niños de entre 10 y 12 años fueron los menos propensos a mostrar actitudes edadistas, según descubrió la investigación.
Los estudios muestran que el edadismo está especialmente extendido en el ámbito laboral. Según la Asociación Estadounidense de Jubilados (AARP en inglés), dos tercios de los trabajadores mayores declaran estar siendo testigos o víctimas de discriminación por motivos de edad en el trabajo, pese a que la Ley estadounidense de 1967 contra la Discriminación por Edad en el Empleo lo prohíbe.
Lo anterior podría surtir un efecto peligroso en su seguridad financiera: se ha demostrado que los trabajadores mayores pasan más tiempo desempleados, lo que hace que les cueste más ahorrar para la jubilación o llegar siquiera a jubilarse.
El edadismo también provoca efectos visibles en la salud. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas mayores que perciben el envejecimiento de forma negativa pueden tener una esperanza de vida más corta que las personas mayores con una visión positiva de la edad avanzada. La OMS también menciona el edadismo como una causa de estrés cardiovascular, de reducción de la productividad y de menor eficacia personal.
Como padres, queremos que nuestros hijos tengan una actitud positiva hacia el envejecimiento y las personas mayores. Y este nuevo estudio sugiere que la configuración de su perspectiva empieza con sus abuelos.
Este post fue publicado originalmente en Motherly, apareció posteriormente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.