De Guindos defiende en el Congreso la venta del Popular frente a un eventual concurso de acreedores
Cinco entidades aspiraban a comprar una entidad quebrada pero que llegó a ser la quinta más rentable del mundo.
Luis de Guindos ha defendido este miércoles el procedimiento de resolución y posterior venta de Popular a Santander, dado que la alternativa habría sido un concurso de acreedores, lo que habría generado "incertidumbre" entre los ahorradores que hubieran depositado su dinero en el banco.
El ministro de Economía ha dado explicaciones en la Comisión de Economía del Congreso a explicar cómo se realizó la intervención del Banco Popular por parte del mecanismo europeo de resolución bancaria, que terminó en una posterior venta al Santander por un euro y la pérdida del valor de todas las acciones en manos de cerca de 300.000 inversores.
De Guindos ha señalado durante su intervención en la Comisión de Economía del Congreso para explicar la venta del banco Popular a Santander que en España más de un millón de hogares eran depositantes de la entidad y que para ellos haber acudido a un concurso de acreedores habría generado "enormes retrasos e incertidumbres" en la recuperación de sus ahorros.
El titular de Economía ha puesto en valor que el proceso se ha llevado a cabo sin comprometer "ni un solo euro de dinero público", a diferencia de "lo que ocurrió hace cinco años", en referencia a Bankia. Una situación que contrasta con los excelentes rankings obtenidos por la entidad en la década de los noventa, cuando se situó como la quinta entidad más rentable del mundo.
CINCO ENTIDADES
Luis de Guindos también ha desvelado este miércoles que en el proceso de venta del Banco Popular, que fue "abierto, transparente y neutral", se contactó con cinco entidades para que presentaran ofertas y que solo dos firmaron acuerdo de confidencialidad.
Finalmente ganó la oferta presentada por el Banco Santander, que se adjudicó la entidad por un euro, como ha recordado de Guindos en su comparecencia a petición propia, en la Comisión de Economía del Congreso, para explicar la intervención y posterior venta del Popular.
De Guindos ha destacado que en el proceso se aplicó de forma estricta la normativa europea, que no se ha comprometido ni un euro público y que ningún depositante se ha visto afectado.
En su opinión, en caso de que el que era el sexto banco del país, el Popular, no hubiera sido liquidado por las autoridades europeas el pasado miércoles, la entidad no hubiera podido "abrir sus puertas y hubiera entrado en concurso de acreedores".