De dónde viene el lío con el discurso de Ana Iris Simón y por qué divide a la izquierda
La manchega pidió más apoyo para los jóvenes y las familias, pero sus palabras han recibido diferentes lecturas.
Este sábado, la escritora manchega Ana Iris Simón fue invitada a un acto en la Moncloa sobre despoblación dentro del plan de España 2050 y, desde entonces, no dejan de pitarle los oídos (y las notificaciones en Twitter). Simón pronunció un discurso crítico ante el presidente Pedro Sánchez y, aunque en él reclamaba cosas aparentemente lógicas, como acceso al trabajo y la vivienda para los jóvenes, se está leyendo de formas muy distintas a cada lado del espectro político. ¿Qué tiene su discurso para que lo critiquen y reivindiquen tanto la izquierda como la (ultra)derecha?
La autora de Feria, su primera novela de autoficción publicada en 2020, afirma que le da “envidia” la vida que tenían sus padres a su edad. Con 29 años, la edad de la escritora ahora, su madre ya tenía una hija de 8 años (la propia Ana Iris), la hipoteca de una casa, un coche, una Thermomix y un trabajo de cartera en el pueblo de Toledo donde vivían. Mientras que algunos simplemente ven en esta declaración una lucha contra la precariedad actual, otros opinan que con esa visión nostálgica se idealiza el pasado de una forma más alineada con el pensamiento de la derecha radical, y arguyen que la visión natalista y la defensa de la familia ‘tradicional’ dejan fuera la diversidad y la decisión de muchas mujeres de no tener hijos.
Para darle la vuelta a esto, la escritora nacida en Campo de Criptana reconoció en Twitter que le daba “la risa” cuando escuchaba estas críticas. “La tradición que defiendo es de fondo y no de forma: reivindico el amor que da lugar y sustenta a la familia”, escribió, y puso directamente el ejemplo de su familia, que de “tradicional” tiene poco. “Mi padre dejó de trabajar para cuidar a mi hermano y su actual mujer es negra e inmigrante. Mi madre también tiene novio. Y tanto mi hermano, que por cierto es homosexual, como yo, hemos vivido indistintamente con ambos”, señaló.
Cita Simón a la mujer de su padre “negra e inmigrante” porque en su famoso discurso ante Pedro Sánchez también se refirió a los migrantes. “Se me ponen los pelos de punta cada vez que se habla de necesitar inmigrantes que nos paguen las pensiones, como si fueran divisas”, dijo este sábado. “Emigrar fue un trauma para mi abuelo en los 70 y para mis amigos en la crisis de 2008, y porque mientras les pedimos a los inmigrantes que paguen nuestras pensiones, no les estamos permitiendo pagar las de sus padres ni las de sus abuelos en sus países de origen, y eso me suena a robarle la mano de obra a los que hace siglos les robaron el oro”, se quejó.
De nuevo, mientras unos ven una crítica al sistema migratorio actual al entender a las personas extranjeras como un simple recurso ‘necesario’, otros consideran que la escritora y periodista aboga por la no inmigración.
Quienes critican su discurso le afean también que presente el mundo rural como algo idílico a lo que deberían aspirar los jóvenes, pero la propia Simón relata en Feria los aspectos más sórdidos de su pueblo, y considera un “error” que se trate de “romantizar la realidad del pueblo”, como explicó a Juan Carlos Monedero en una entrevista.
“El pueblo no es una arcadia feliz. [...] Con 5 años, sabía cuánto le medía el miembro al ‘tonto del pueblo’ y dónde estaba el puticlub”, contó Simón a Monedero. Pero “de nada sirve volver con una lógica civilizadora a los pueblos como bárbaros que se largaron”, prosiguió la escritora y periodista en una entrevista emitida a mediados de mayo, antes de su polémico discurso.
El pensamiento de Simón es compartido por una parte del mundo obrero, del mundo rural y de la izquierda (pudiendo estos coincidir o no), pero lo cierto es que una parte de la extrema derecha también pone ojitos al discurso de la joven. En una entrevista en La Lengua Moderna, el periodista Quequé comentó entre risas con Simón que a ambos los seguía en Twitter Santiago Abascal, líder de Vox. “Yo creo que está al loro, fue el primer político que me siguió”, replicó la joven. “Creo que tiene un equipo muy potente en redes, y que está muy al loro de lo que pasa con los jóvenes”, reiteró Simón. “También fue el primer político que se puso un meme de foto de perfil, que fue de Charmander, y la estrategia que sigue con la gente joven es muy buena, a la vista está, es el partido más votado entre los varones de menos de 30 años, así que algo hay”, remató la escritora en el programa de Cadena Ser emitido hace dos meses.