Para qué sirven los cubremascarillas que venden Benetton o Carrefour
No son un producto sanitario contra el coronavirus.
Antes que empezara la crisis del coronavirus lo más cerca que habíamos estado de una mascarilla era posiblemente un capítulo de Anatomía de Grey. Ahora el uso de mascarilla es obligatorio y la mayoría de españoles sabe que existen varios tipos: quirúrgica, higiénica o fpp2, entre otras.
Además de estos modelos, un nuevo producto ha entrado en el mercado y está especialmente pensado para las personas que no pueden evitar tocar la mascarilla. Se trata de los cubremascarillas, que son una especie de mascarilla de tela sin filtros diseñada para colocarse sobre la quirúrgica.
Sirven fundamentalmente para evitar el contacto directo con la mascarilla al tocarla con las manos y para evitar salpicaduras.
Carrefour fue uno de los primeros establecimientos en incorporarlos a su catálogo y venden tanto tallas para adultos como para niños. Están disponibles packs de tela blanca de 3 unidades por 5 euros —solo para adultos— y modelos estampados para toda la familia en packs de 2 unidades, también por 5 euros. Son reutilizables y deben lavarse después de cada uso.
Más llamativos son los diseños de Benetton, que ha lanzado una colección de cubremascarillas con los clásicos colores de la marca italiana y mensajes de esperanza. Está compuesta por siete modelos estampados y seis lisos en diferentes colores; todos son 100% algodón y están fabricados en Italia.
Desde la marca recomiendan lavarlos a máquina a 40 grados después de cada uso y destacan que no se debe utilizar lejía. Los cubremascarillas estarán disponibles a principios de julio por 4,95 euros, aunque si se hace un pedido online que supera los 80 euros, su precio se reduce a 1 euro cada uno.