Corinna Larsen y el empresario Sanginés-Krause tuvieron una sociedad en Sheychelles
La Fiscalía suiza ya la investigaba por un presunto delito de blanqueo de capitales en una cuenta en Bahamas.
La filtración periodística de los papeles de Pandora ha vuelto a salpicar a Corinna Larsen. Después de que El País y La Sexta diesen a conocer que quiso dejar parte de su fortuna opaca a Juan Carlos I en caso de que ella muriese, ambos medios han publicado este miércoles que Larsen y el empresario mexicano Allen Sanginés-Krause mantuvieron una sociedad en Sheychelles, conocido paraíso fiscal.
Según apunta el diario, Larsen y Sanginés-Krause son accionistas de Fortuna Ventures Ltd. Lo hacen a través de dos sociedades, Apollonia Holdings en el caso de ella, y Montpascal Holdings en el de él.
Corinna ya está siendo investigada por la Fiscalía de Suiza por un presunto delito agravado de blanqueo de capitales por supuestamente haber recibido 64,4 millones de una cuenta helvética del rey emérito Juan Carlos I a otra con sede en Nassau (Bahamas). Por su parte, el empresario mexicano es investigado en España por la Fiscalía del Tribunal Supremo por supuestos pagos del anterior monarca.
Factura de 30.000 euros sin especificar
Tal y como ha dado a conocer El País, la sociedad Apollonia Holdings GMBH era desconocida hasta el momento. Esta fue creada en el archipiélago del Índico el 21 de agosto de 2009 por el despacho panameño Alcogal. Entonces, el 19 de noviembre de 2010, Larsen pasó a ser su directora y secretaria en sustitución de Andrés Maximino Sánchez.
No obstante, el 2 de junio de 2010, la sociedad emitió una factura por valor de 30.000 euros a Montpascal Advisory Services por motivos desconocidos. Esta fue remitida a la dirección de la sociedad de Sanginés-Krause, en un castillo irlandés cercano a la población de Clonmellon. Según asegura El País, se trata de una propiedad que ha frecuentado el rey emérito.