La concejala de Ceuta que pone en su sitio a la ultraderecha: "De una mente normal no salen afirmaciones como las de Vox"
Entrevista con Fatima Hamed Hossain, portavoz de MDyC: "Vox es un grupo de pirómanos sociales que nada aportan".
“Es usted un fascista. A su formación hay que ilegalizarla a nivel nacional. Yo no sé qué están haciendo los demás partidos que se llaman demócratas con tanta tibieza”.
Hace menos de dos meses, desde la tribuna de la Asamblea de Ceuta, la concejala y portavoz del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía de Ceuta (MDyC), Fatima Hamed Hossain, definía así de rotunda a un concejal del partido de ultraderecha Vox.
Su discurso fue muy compartido en Twitter, donde hace unas semanas, otra de sus intervenciones respondiendo a la ultraderecha volvió a viralizarse.
Respondía al mismo concejal, Carlos Verdejo, quien había definido a Hossain como “yihad”. “Usted es yihad, usted es sharia. Usted es un retroceso social y un fracaso del sistema educativo español y de la educación”, dijo el portavoz ultra.
“Usted dice que yo soy yihad. ¿Usted sabe lo que significa la palabra yihad? Usted no tiene ni puñetera idea. Yihad significa esfuerzo. Y a mí me enseñaron desde muy pequeñita a esforzarme”, contestó Hossain.
“Me sorprendió gratamente”, explica en declaraciones a El HuffPost preguntada por la notoriedad de sus intervenciones. “Es innegable que en estos tiempos, todo apoyo para plantar cara a la ultraderecha, es más que necesario e imprescindible”, asegura.
“Hay que tejer una red de sentido común que no permita que quienes no respetan a los demás por ser diferentes, se sientan respaldados si no todo lo contrario”, dice la portavoz de MDyC, cuya imagen se ha popularizado con sus contundentes intervenciones.
Nacida en hace 43 años en una de las zonas más humildes de Ceuta, decidió estudiar Derecho y especializarse en mediación civil y en derechos humanos para “intentar, al menos, cambiar las cosas”. Lleva 14 años ejerciendo y desde 2014 lidera MDyC, un movimiento político que la llevó a convertirse, en 2015, en la primera mujer musulmana en liderar un grupo político en la Asamblea de Ceuta.
¿Qué percepción ve en la gente en España sobre su religión?
Afortunadamente, y por lo general, creo que el respeto es mayoritario, al margen de que puedan existir determinados prejuicios alimentados por el sensacionalismo o por otros intereses.
¿Hay muchos prejuicios?
Creo que hay quienes aún no han entendido que tener una nacionalidad no es incompatible con tener un credo, otro o ninguno y que es precisamente ahí, en la pluralidad y el respeto, donde reside la clave. Es como cuando te preguntan si alguien es español o musulmán, como si fuera incompatible.
¿Qué nos falta por entender?
Supongo que hace falta incidir más en la aconfesionalidad del Estado y en la pluralidad y multiculturalidad como claves del avance social. En Ceuta hemos vivido siempre esa pluralidad, hemos compartido la vida con nuestros vecinos, fueran cristianos o hebreos. No han existido guetos, por eso ahora no entendemos cómo Vox ha surgido con tanta fuerza, aunque quizás se deba al hartazgo de la gente de Ceuta con el alcalde del PP [Juan Jesús Vivas].
¿Cómo podemos definir ideológicamente a MDyC?
Somos una formación localista cuyo interés principal es el de los ceutíes sin supeditarnos a las pautas que puedan darse a los partidos de implantación nacional, cuyos representantes, por desgracia, olvidan las reivindicaciones de nuestro pueblo a la hora de elevarlas alto y claro a las más altas instancias nacionales, agachando la cerviz ante sus ejecutivas nacionales.
En 2019 la ultraderecha entra a la Asamblea con seis diputados y el 22% de los votos, ¿cómo vive ese momento? ¿Se lo esperaban?
La verdad es que no. Fundamentalmente por sus mensajes basados en el odio y la discordia lejos de las propuestas constructivas que aporten valor añadido a la política local. Cristianos, musulmanes, hebreos e hindúes hemos convivido en Ceuta con total normalidad. Aquí oyes la llamada a la oración desde una mezquita, ves las procesiones de Semana Santa, felicitas la Janucá o ves como Ganesh visita a nuestra Patrona en la Iglesia de África. Por eso no entendemos cómo en una ciudad de la que todos formamos parte puede surgir ese potencial tan racista.
¿Hay más racismo en Ceuta desde el auge de Vox?
No lo creo. Cuestión distinta puede ser la visibilización de algunos comentarios o actitudes que habitualmente no existían con tanto descaro. Su más claro ejemplo son sus representantes en el ayuntamiento donde pleno sí, pleno también, lo único que buscan es la confrontación permanente sin aportar nada. Pero en los vecinos no se vive ese conflicto, Ceuta no es racista, nuestra solidaridad como pueblo se demuestra cada día, ayudando a quien lo necesita, colaborando con las entidades sociales, donde nadie te pregunta de qué religión eres.
Estamos viendo que la ultraderecha crece en todos lados, el último lugar, en Cataluña, ¿qué opinión le merece? ¿Existe algún antídoto contra este fenómeno?
El único antídoto es tomar conciencia y dejar al descubierto cómo son y cuáles son sus objetivos. Ellos se alimentan del miedo, de representar, a través de las personas que vienen de fuera, todo mal habido y por haber. Creo que lo que mejor que podemos hacer es plantarles cara con argumentos, ya que ellos no suelen tener más que soflamas y propaganda falsa. Y, por supuesto, incidir en la importancia de la educación, de la formación y de la cultura, que es la que derriba todos los prejuicios. A la extrema derecha le encanta explotar a todos estos inmigrantes sin documentación. Existen infinidad de ejemplos de inmigrantes que han llegado a morir por la explotación laboral. Lo único que buscan es vivir del erario público, como ha hecho su líder [Santiago Abascal] toda la vida.
Hablemos del incidente del otro día en la Asamblea. ¿Qué sintió al escuchar las palabras del diputado de Vox?
En principio, estupefacción. Me resultó surrealista escuchar semejantes burradas. Aunque, conociéndoles, en cuanto les dejas sin argumentos recurren al insulto, a llamarte fracaso del sistema educativo o retroceso social. Aún así, ellos saben que MDyC siempre les va a plantar cara incluso en los juzgados si hace falta, como hemos hecho por los mensajes racistas que han salido de un grupo de WhatsApp en el que presuntamente estaban miembros y afines de este partido.
¿Cuántos episodios así vive en cada pleno?
Por desgracia, demasiados. La ciudadanía de Ceuta tiene suficientes problemas como para tener que escuchar las sandeces de un grupo de pirómanos sociales que nada aportan. Sin embargo, la práctica totalidad de las propuestas de Vox buscan la confrontación, la bronca, sin argumento alguno. Como los típicos de las denuncias falsas, la invasión de inmigrantes o las ayudas sociales, que intentan romper la convivencia, como supuestamente decían en uno de esos mensajes: “No es nada extraño que al final haya que combatir militarmente”. De una mente normal no salen esas afirmaciones.
¿Existe connivencia de otros partidos ante este comportamiento?
No podemos olvidar que estuvieron un año cogobernando en la sombra con el PP, que les puso la alfombra roja. Ello les permitió crecerse y exigir una serie de condiciones que buscaban incendiar la ciudad, como la de retirar las subvenciones a asociaciones sociales porque apoyaban a los más desfavorecidos. En el siguiente presupuesto exigieron la eliminación de todas las subvenciones a cualquier entidad que oliera a musulmán, cuando la mayoría de ellas no tienen credo, son de los ceutíes, nadie te lo pregunta para acceder a sus servicios o formar parte de ellas. A pesar de todo, no podemos obviar que aún queda mucho para acabar la legislatura, con lo cual no es posible asegurar que la ciudadanía no tenga que padecer una nueva alianza entre el PP y Vox.
Tras lo sucedido, ¿ha notado solidaridad de parte de algún diputado?
Sí. Creo que escuchando esas aberraciones lo extraño sería lo contrario.
Después se cruzarían por los pasillos, ¿qué sucedió?
Nada, nosotros no perdemos las formas y su actitud nos es indiferente.