Cómo el triste final de un cachorro ha revolucionado las elecciones en Turquía
La crueldad hacia los animales se ha convertido en un tema central de la campaña.
La foto es insoportable. Un pequeño labrador de un mes, envuelto en vendas blancas, se ha convertido en el tema que ha hecho vibrar a Turquía a pocos días de las elecciones presidenciales.
El perrito fue encontrado en el bosque, con las patas y la cola cortadas, por una mujer que estaba dando de comer a perros abandonados. Pese a los cuidados de un veterinario, el cachorro murió horas más tarde. En culpable, un obrero que trabaja en los alrededores del lugar, fue detenido el 17 de junio.
La suerte del cachorro de pelo negro ha revolucionado a la sociedad turca, que ha visto en ese terrible maltrato la marca de un problema social de raíz. En Twitter, la gente ha expresado sus sentimientos con el hashtag#HayvanaSiddetSuctur, en español "La violencia contra los animales es un crimen". Por su parte, la célebre cantante de pop turca Simge Sağın dedicó todas las canciones de su último concierto al pequeño animal.
Este movimiento de indignación no ha dejado indiferentes a los candidatos a la presidencia, teniendo en cuenta que los comicios se celebran este domingo, 24 de junio. Erdogan, candidato a su propia sucesión, ha hablado largo y tendido en los medios sobre esta cuestión, explicando que "proteger los animales no es sólo un deber, sino una obligación de nuestra fe, de nuestra humanidad". Su principal opositora, Meral Aksener, también ha denunciado la increíble crueldad de este suceso, apelando a reforzar las leyes que protegen a los animales.
Del lado del Gobierno este mensaje ha calado: el ministro de Justicia, Abdulhamit Gul, se ha comprometido a aplicar una ley que castiga con varios años de cárcel la violencia contra los animales. El texto se elaboró en enero de 2018 y quedó en el olvido... pero Gul asegura que se promulgará enseguida, en cuanto las urnas den su veredicto. Para el presidente turco, cuya marcha hacia el poder absoluto se ha complicado un poco por una campaña lenta, el cachorrito se ha convertido en una clave comunicativa de máxima importancia.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Francia y ha sido traducido del francés.