El Gobierno enmarca el cese de Paz Esteban como un "paso adelante" del CNI y coloca a Esperanza Casteleiro
Robles habla de "sucesión" y Moncloa confirma que se infectó también el móvil de Marlaska y hubo un intento fallido con Luis Planas.
El caso Pegasus se lleva por delante la cabeza de Paz Esteban. El Gobierno ha cesado a la directora del CNI para dar “un paso adelante” en el centro en un momento crítico de la legislatura por las tensiones entre los socios del Gobierno por el espionaje y coloca en su puesto a Esperanza Casteleiro, secretaria de Estado de Defensa.
Esteban estaba en el centro del huracán político -algo que no va con las sombras y discreción del CNI- después de que se descubriera que fueron espiados los móviles del presidente del Gobierno y de la ministra de Defensa un año después y que reconociera la propia directora ante los diputados que se infectó también el móvil de 18 independentistas, con autorización judicial del Tribunal Supremo.
Esto ha supuesto una auténtica convulsión políticamente, especialmente por el enfado de Esquerra Republicana, que exigía cabezas. El pasado viernes coincidieron en Barcelona Pedro Sánchez y Pere Aragonés. El dirigente catalán trasladó la gravedad de la situación, en tanto que el presidente le emplazó a una reunión y apostó por “resolver la situación”. Todavía no hay fecha para esa cita.
Sánchez quería actuar rápido para solventar esta situación, y tenía la presión también de que tanto Podemos como ERC pedían el cese de la ministra de Defensa, Margarita Robles, persona de máxima confianza de Sánchez, la titular con mejor valoración entre los ciudadanos y pieza clave para organizar la cumbre de la OTAN de Madrid del 29 y 30 de junio.
Precisamente, ha sido Robles, junto a la ministra de Política Territorial y portavoz, Isabel Rodríguez, quien ha dado la cara después del Consejo de Ministros para explicar la decisión adoptada por el Ejecutivo sobre Esteban, a quien defendió durante estos días de crisis diciendo que esta soportando estoicamente imputaciones que no eran reales.
Moncloa también ha hecho público el resultado de las investigaciones sobre los móviles de los ministros, confirmado que además de los móviles de Sánchez y Robles, también fue infectado el del titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska. También hubo un intento fallido de contagiar el terminal del ministro de Agricultura, Luis Planas, pero no se logró. Estos casos se llevarán también a los tribunales.
Robles ha hecho una defensa del CNI y ha apoyado la labor de Esteban, aunque se hayan podido producir errores. La ministra de Defensa ha rechazado que sea una “destitución” y lo ha calificado como “sustitución”. Además, ha mostrado que tiene la “plena confianza” del presidente.
La ministra de Defensa durante la larga rueda de prensa en La Moncloa no ha reconocido concretamente los motivos del cese de Esteban y ha querido hablar en todo momento de que se trata de impulsar el CNI, modernizarlo y darle más importancia a las nuevas tecnologías.
También ha rechazado que sea por la presión del independentismo y ha negado que haya sucedido algo desde la comparecencia de la semana pasada en la que hizo una defensa cerrada de Paz Esteban. Lo ha vendido como un “sucesión” en la que nombra, a propuesta suya, a Casteleiro, también del CNI y su mano derecha en Defensa (ha sido su jefa de gabinete y actualmente es secretaria de Estado de Defensa). “Se lo sabe todo”, ha argumentado Robles. Al puesto vacante ascenderá ahora a la subsecretaria, Amparo Valcarce.
“Tengo la plena confianza del presidente del Gobierno con quien llevo muchos años trabajando con él, a quien conozco, admiro y respeto y eso no me lo va poder quitar nadie”, ha indicado Robles cuando le han preguntado sobre si había pensando dimitir y si tenía la confianza del jefe del Ejecutivo.
En todo momento ha dado a entender que el hecho de que la nueva directora del CNI sea su ‘número dos’ es un gesto de respaldo del jefe del Ejecutivo.
Desde el Gobierno también se ha lamentado la actitud del PP, que ha criticado el cese de Esteban: “Parece constatable que cambió el líder del PP pero mantiene al community manager, porque ese tuit que ha puesto Feijóo lo podría haber puesto Casado”, ha lanzado también desde La Moncloa Isabel Rodríguez.
Una rueda de prensa marcada por el mal trago de Robles, ya que de ella depende el CNI, que ha tenido el gran fallo de seguridad y que, además, espió a los independentistas sin la orden de La Moncloa. Lo que le ha convertido en el centro político, algo en lo que no debería estar el sistema de los espías.