Crisis en Grecia: Mitsotakis contra las cuerdas por un escándalo de escuchas a la oposición
Los servicios secretos pincharon el teléfono del líder del Partido Socialista, la tercera fuerza política en el país, y de varios periodistas. El Parlamento analizará lo ocurrido.
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, del centroderecha Nueva Democracia, está contra las cuerdas por un escándalo de espionaje a la oposición. Aunque el dirigente dice y repite que no está implicando en el asunto, la trama le salpica, porque es grave que el teléfono de Nikos Androulakis, líder del Partido Socialista -la tercera fuerza política en el país-, fuera pinchado en 2021, como ahora se ha sabido.
El ahora eurodiputado griego fue espiado desde septiembre de 2021 hasta mediados de diciembre de ese año. Androulakis, elegido líder del partido PASOK en diciembre de 2021, desveló el viernes estas escuchas, aunque no contó de dónde ha logrado la información. No fue la única víctima, porque también varios periodistas fueron escuchados ilegalmente por el Servicio Nacional de Inteligencia (EYP). Al menos dos, uno que cubre temas migratorios y el otro economía, han emprendido acciones legales tras denunciar intentos de jaquear sus móviles.
Desde la semana pasada, cuando el caso salió a la luz, los partidos de la oposición exigen una investigación a fondo y califican las revelaciones como el Watergate de Mitsotakis.
“El Servicio Nacional de Inteligencia subestimó la dimensión política de esa acción concreta. Era formalmente adecuada, pero políticamente inaceptable.” ha declarado el primer ministro en un mensaje televisado, en el que aseguró que sólo “hace unos días” supo qué pasaba. “Fue un error, no lo sabía y nunca lo hubiera permitido”, insistió.
Pese a que Mitsotakis ha anunciado cambios en la estructura del Servicio Nacional de Inteligencia (EYP), no ha esclarecido por qué se llevaron a cabo estas escuchas, ni de quién recibieron la orden de hacerlo. Fuentes del Gobierno habían filtrado en los últimos días a la prensa local que la solicitud de espiar al líder socialdemócrata provino del extranjero, algo a lo que Mitsotakis no se refirió en absoluto.
El principal partido de oposición, el izquierdista Syriza del exprimer ministro Alexis Tsipras, ha pedido la dimisión del primer ministro y le exige que revele si hubo más políticos y periodistas que fueron escuchados. Por el momento, tanto el director del servicio secreto como el jefe de gabinete del premier han dimitido en medio del escándalo. Mientras que el izquierdista MeRA25, el partido del ex primer ministro de Finanzas Yanis Varufakis, pide también la dimisión de Mitsotakis y elecciones anticipadas, el partido de Andrulakis no se ha sumado a esta reclamación, al menos por ahora.
El Ejecutivo ha aceptado la petición de Andrulakis de convocar una Comisión de Investigación en el Parlamento, Mitsotakis recalcó ayer que esta funcionará “bajo las condiciones impuestas por la naturaleza del objeto a investigar”. Hoy se ha sabido que se va a adelantar la apertura de su Parlamento tras el periodo estival al 22 de agosto, algo insólito, para tratar este escándalo, a petición de la oposición.
Panayotis Kontoleon, quien hasta la semana pasada fue jefe del servicio de inteligencia griego, había sido nombrado al frente de EYP un mes después de que el Gobierno conservador ganara las elecciones en julio de 2019, período en el cual el nuevo Ejecutivo cambió también la estructura de EYP para que su jefe y la agencia responda directamente a Mitsotakis.
En 2021 hubieron 15.475 casos en la que un fiscal aprobó el levantamiento de la privacidad de un individuo por razones de “seguridad nacional”, sin otorgar más justificación, mientras esta cifra era menos de la mitad en 2017, según el último informe de la Autoridad para la Protección de la Privacidad en las Comunicaciones de Grecia.