La CEOE cree que es posible pactar la reforma laboral a pesar del desacuerdo por las pensiones
Antonio Garamendi asegura que la patronal está en la mesa con "espíritu de acuerdo" y "sin líneas rojas".
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha asegurado que es posible pactar con Gobierno y sindicatos en algunas negociaciones pese a no haber llegado a un consenso en otras, y ha resaltado que debatirán sobre la reforma laboral con “espíritu de acuerdo” y “sin líneas rojas”.
Durante su asistencia a un acto organizado por Hostelería de España, el presidente de la patronal ha incidido en que el planteamiento defendido por el Gobierno en materia de pensiones -que se saldó sin consenso- “tiene muy poco que ver” con lo que está en discusión a la hora de debatir la reforma del mercado de trabajo.
“La negociación está abierta, y cada mesa es una mesa independiente. Por lo tanto, es independiente que en unas mesas digamos que sí y podamos tener un acuerdo y que en otras digamos que no”, ha señalado este viernes en declaraciones a los periodistas. También ha concretado que queda tiempo para el diálogo. “Vamos a darle margen y espacio, tenemos un mes por delante”, ha defendido.
La postura de la patronal
Garamendi ha defendido que en estas conversaciones la CEOE pretende “hablar de lo que habla Europa”, con el propósito de analizar la temporalidad y cómo conseguir que el paro juvenil baje. En esos temas “nos van a encontrar y queremos trabajar”, ha recalcado el dirigente patronal, quien no obstante ha advertido de que estas cuestiones “tienen poco que ver” con “aspectos” incluidos en el acuerdo de Gobierno firmado por PSOE y Podemos.
La postura de la CEOE pasa por hacer compatible que los trabajadores tengan seguridad con el hecho de que las empresas también dispongan de suficiente “flexibilidad para adaptarse”. Con todo, Garamendi también ha recordado que ya se han alcanzado pactos anteriormente. “Hemos alcanzado 12 acuerdos en este tiempo y cuando algo se plantea que no es suficiente o no va en la línea adecuada, también decimos que no nos ha gustado”, ha reseñado.
“Vienen tiempos muy complicados”, ha insistido Garamendi, quien ha recordado tanto el impacto de la pandemia como la reciente subida de los costes de la energía y las materias primas, a los que se suman los problemas en el sistema de transportes a escala global.