Castilla-La Mancha prohíbe las terapias de conversión con su nueva ley LGTBI aprobada por unanimidad
Solo Castilla y León y Asturias tienen pendiente normar la Diversidad Sexual y los Derechos LGTBI.
Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado con los votos a favor del PSOE, PP y Cs -los tres grupos con representación parlamentaria- el proyecto de ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, que garantiza los derechos humanos y constitucionales de este colectivo, la igualdad efectiva y el derecho a la no discriminación.
Con la aprobación de esta ley LGTBI en Castilla-La Mancha, solo dos comunidades autónomas no tienen una norma sobre este asunto, en concreto, Asturias y Castilla y León.
La ley tiene como objeto la consolidación y ampliación de los derechos de personas lesbianas, gais, bisexuales, transexuales o trans e intersexuales, y la adopción de medidas concretas mediante la puesta en marcha de políticas públicas que garanticen el libre desarrollo de la personalidad, para evitar situaciones de discriminación y violencia, y asegurar que en Castilla-La Mancha se pueda vivir la diversidad sexual en plena libertad.
Prohíbe toda práctica de terapias y pseudoterapias de aversión, conversión o contracondicionamiento destinadas a modificar la orientación sexual, la identidad sexual, el desarrollo sexual o la expresión de género de las personas LGTBI.
Asimismo, uno de los objetivos fundamentales de esta ley es promover estudios que aporten datos sobre la realidad LGTBI y regular la garantía estadística de los mismos, al tiempo que se compromete con la protección de la infancia y la adolescencia e incluye la puesta en marcha de un sistema de acogida residencial para personas LGTBI en situación de especial vulnerabilidad o exclusión a causa de su orientación sexual.
La consejera de Igualdad y portavoz del Ejecutivo castellanomanchego, Blanca Fernández, ha aplaudido la unanimidad en la votación, “un gesto imprescindible en un momento convulso”.