Carlos Bardem: "Es mucho más humano aliviar con el humor que hacer política con los muertos"
El guionista David Marqués y el actor Carlos Bardem responden en una entrevista a las críticas de la ultraderecha a la serie de TVE sobre el confinamiento por el coronavirus.
Al equipo de Diarios de la cuarentena no le ha hecho falta ni abrir la boca para defender la serie de los ataques de la ultraderecha que llegaron incluso antes de la emisión del primer capítulo. Es el público el que ha hablado y la ficción de TVE ha tenido una aceptación más que respetable: 1.697.000 espectadores.
El HuffPost se ha puesto en contacto con uno de sus creadores, David Marqués, y con el actor Carlos Bardem, uno de sus protagonistas, que ahora pueden defender la ficción con el respaldo de la audiencia y de las buenas críticas de los espectadores en redes.
¿Por qué esa tirria de la ultraderecha a la cultura?
David Marqués: “Me pregunto qué estarán haciendo en casa para entretenerse la gente que critica tanto esta profesión (la cultura). Los libros son cultura, las series o películas americanas también, la música... No sé, imagino que estarán jugando con un palo”.
Carlos Bardem: “Le tienen pánico porque un pueblo culto no es permeable a los mensajes de odio, es impermeable a los bulos. Cuando todo esto pase, ojalá pronto, la historia les va a poner en su sitio y veremos quién ha sumado y quién ha restado en la crisis más grande que hemos vivido como sociedad. La cultura siempre ha aportado y ellos ensucian”.
La crítica no es la primera de la ultraderecha a las ficciones españolas. De hecho, la pasada semana Vox se refería utilizaba la demagogia para tachar a la gente de la industria como ‘titiriteros’: “España puede vivir sin sus titiriteros, pero no sin sus agricultores y ganaderos”.
También Mientras dure la guerra, la última película de Alejandro Amenábar, llegó a las salas españolas en septiembre de 2019 con una petición de boicot. Y no es el único largometraje que se enfrentó a ese tipo de campaña: La reina de España, de Fernando Trueba, Ocho apellidos vascos, de Emilio Martínez-Lázaro o El guardián invisible, basada en la novela de Dolores Redondo.
¿Se puede hacer humor con el coronavirus?
Marqués: “Claro. El humor se está haciendo desde que empezó esto, con los memes en redes o los vídeos que nos llegan a todos a WhatsApp. Además, hay programas diarios que también lo hacen, como Late Motiv o El intermedio, y no pasa nada. Hemos hecho ficción con un respeto absoluto y no tiene nada que ver con ofender. No estamos tocando la enfermedad, que me parecería horroroso, hablamos de la gente que está encerrada en casa, de la convivencia. Entiendo que no pueda gustar después de verlo, pero no estamos haciendo ninguna burla”.
Bardem: “No es que se pueda hacer, es que se debe hacer humor respetuoso con el coronavirus, para liberarnos. Es un mecanismo de supervivencia básico, reírnos de lo que tenemos nos ayuda. Se ha hecho con esa intención y creo que la cumple. Es humor sobre situaciones del confinamiento, de esos comportamientos cómicos, paródicos y grotescos que hacemos todos. No es más que llevar a la televisión lo que todos tenemos en los móviles. Es mucho más humano aliviar con el humor que hacer política con los muertos”.
La otra de las quejas anteriores a la emisión no son nuevas: por qué se financian con dinero público películas o series. Protestaron porque Amenábar recibió una ayuda pública de 1,4 millones de euros para rodar Mientras dure la guerra y lo han hecho también porque Diarios de la cuarentena se emita en una televisión pública. Esto no pilla a nadie de nuevas.
Aunque la serie de TVE también se ha criticado desde el desconocimiento. Atacaron la ficción porque “los actores habían salido de casa y se habían saltado el confinamiento. Nada más lejos de la realidad.
¿Se han saltado el confinamiento?
Marqués: “No han salido de sus casas. Ni los actores ni el resto del equipo. Vi muchos de esos tuits y ya están borrados muchos de ellos”.
Bardem: “En la serie mi pareja Cecilia Gessa y yo nos hemos encontrado con el reto de ser iluminadores, maquilladores, sonidistas... todo para darle una factura mínima”.
Los beneficios de la serie se donarán a Cruz Roja Española para la compra de material sanitario.