Calvo: "Es Unidas Podemos quien vuelve a decir blanco o negro"
La vicepresidenta en funciones sostiene que "el tiempo no ha pasado en balde" y que ya sólo es posible un pacto de programa.
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, la socialista Carmen Calvo, ha valorado esta mañana en la Cadena SER la propuesta hecha ayer por Unidas Podemos para negociar de nuevo un Gobierno de coalición para España. Calvo sostiene que ese tiempo ha pasado, que ya no es momento de hablar de cargos y ministerios, sino sólo de programas y calendario, porque se ha demostrado, denuncia, que “las pretensiones de UP siguen siendo literalmente las mismas” y trata de “imponer una fórmula de cogobierno, de dos gobiernos en uno”.
Ante el documento enviado ayer por la coalición de Podemos e Izquierda Unida, Calvo ha defendido la propuesta “en serio y razonable” que ya hicieron antes de agosto, para un Gobierno de coalición, “que en el momento en el que los socialistas lo propusimos era viable”.
UP lo rechazó, recuerda, y eso quiere decir que “son ellos los que frustran esa situación, porque sus pretensiones son la imposición de un grupo al que triplicamos los escaños sobre el programa electoral del partido que ha ganado las elecciones”. “No es comparable”, insiste, con la situación que se ha dado en comunidades autónomas y ayuntamientos donde sí han logrado llegar a pactos de gobernabilidad, porque ahora están en juego políticas de Estado como Exteriores o Interior. Expresamente ha citado Cataluña, uno de los puntos donde más diferencias mantienen los dos partidos, como uno de los retos nacionales.
Por ejemplo, Calvo ha recordado que Unidas Podemos ha manifestado que con ellos en La Moncloa no habría aplicación del artículo 155. “Hasta donde sé, la Constitución sigue estando activa, entera”, ha puntualizado. También ha dicho que no necesitan “comisarios” que vigilen su labor, porque el PSOE ha ganado unas elecciones, “de forma insuficiente, bien, pero necesita respeto” y no vigilancia.
“No hay precedentes de un grupo que trate de imponer un cogobierno, de dos gobiernos en uno. El Movimiento 5 Estrellas en Italia no ha evitado la derechización de Italia, no ha abierto los puertos... Nosotros queremos una investidura que haga gobernable España”, ha enfatizado, poniendo como ejemplo una formación que en sus inicios compartió ideario con Podemos y que ahora está sumida en una crisis de Gobierno en Italia. “Hablamos del día a día del Gobierno de España”, ha defendido.
“Este tiempo no ha pasado en balde”
Cuando Aimar Bretos le ha preguntado por qué durante un tiempo fue factible un Gobierno en coalición y ahora ya no lo es más, la vicepresidenta ha contestado rotunda que es porque “este tiempo no ha pasado en balde”. Iglesias, ha recordado, se quejó de que los socialistas se fueran de vacaciones en agosto. “Pues nos hemos ido porque él rechazo una propuesta, eso ha generado una gran desconfianza, son muy diferentes al PSOE”, ha insistido.
Sobre la opción que hay sobre la mesa, de que UPO entre en la mesa del Consejo de MInistros o vayamos en otoño a elecciones, Calvo ya dicho que se trata de un ”órdago impositivo”, que se “compadece muy poco” de la visión política de la izquierda. También se ha quejado de las declaraciones, anoche, del líder de Podemos en Antena 3, cuando dijo que los políticos no son de fiar. “Esa no es nuestra visión de la izquierda, somos de culturas muy distintas”, ha rechazado.
¿Qué va a ofrecer el Gobierno, entonces, a UP para acercarse a ellos y lograr sus votos para la investidura de Pedro Sánchez? Calvo es rotunda: “un programa, calendario, propuestas”. “Sus escaños son insuficientes para la investidura y cada día para la gobernabilidad, propusimos en junio programas, contenidos, objetivos, y entonces dijo que él quería estar en el gobierno. Luego, cuando él dijo que se retiraba, se hablaba de ministerios, puestos, no pudimos avanzar apenas en contenidos”, ha denunciado.
Calvo también se ha quejado de que el documento de propuestas de Unidas Podemos les llegó a la vez que a los medios de comunicación, y no antes, como sostiene la formación que lidera Iglesias. Y con esas formas no comulgan. “El presidente ya lo dijo: no será investido a toda costa, contra sus convicciones. Por eso esa opción (de coalición) ya no está abierta. Son ellos los que dicen o blanco o negro a quien ha ganado las elecciones”, concluye.
Aviso al Open Arms
Calvo también ha valorado el fin de la agonía de los migrantes del Open Arms, que la pasada noche desembarcaron en Lampedusa (Italia) tras 19 días sin permiso para tomar tierra. “Por supuesto”, dice, celebra este buen final, de una situación “que se genera en otro país y en la que España ha tratado de ayudar en todo momento”, incluso en la “decisión última” de mandar un barco “para salvar una situación límite”. “Siempre con la coherencia de la seguridad y el respeto a los derechos humanos”, ha precisado.
El buque de la Armada que ayer partió de Rota para recoger a estos migrantes no volverá forzosamente, sino que según ha dicho, como estaba en prácticas, “está en disposición” de ir a Italia y traer a los migrantes que España vaya a acoger, en función del reparto que se está negociando en la Comisión Europea y que implica a cinco estados más.
Sus declaraciones más duras han sido cuando se le ha preguntado por el barco de Open Arms, que queda temporalmente incautado en tierra por las autoridades de Italia. Sobre su futuro, ha dicho que “hasta (el fundador de la ONG, Oscar) Camps decía que está en las condiciones en las que está”, incapaz de llegar a España, que “tiene licencia para ayuda humanitaria y transporte de víveres” y nada más. “Esa es la concesión administrativa y la legalidad española y ese es su cometido, no de navegar ni tener la situación que tenían”, reprocha. Ahora es su responsabilidad mover o no el barco y para qué.
Sobre si Marina Mercante va a multar a la ONG catalana precisamente por hacer rescates cuando sólo tenía permiso para repartir ayuda humanitaria, ha dicho que “no hace falta recordarlo”. “Estamos en un estado de derecho y todos estamos sometidos a las leyes, todo el mundo sabe lo que puede hacer y lo que no y nadie está a salvo de esto, tiene una autorización humanitaria (...). La ignorancia de la ley no exime de su cumplimiento”, sostiene, dejando la puerta abierta a esta sanción.
“No tiene permiso para rescatar”, ha repetido, pero “por encima de esas circunstancias, el presidente del Gobierno apostó por atender una situación humanitaria para un barco de pabellón español”.
Tampoco se ha comprometido a aceptar en España a alguno de los más de 300 migrantes que siguen en otro barco, el Ocean Viking de MSF y SOS Mediterranée. Tiene que mejorarse el sistema de asilo y reparto en Europa pero mientras “no puede corresponder a un mismo país siempre la respuesta”.