'Burn-out': El síndrome de estar quemado en el trabajo, ¿una verdadera enfermedad?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha incluido el burn-out, el síndrome de estar quemado por el trabajo y lo que lo rodea, en la Clasificación Internacional de Enfermedades(CIE). Éste es el catálogo de dolencias oficiales. Hay quienes ven en esto un paso más en la actual medicalización de la vida diaria. Todos lo hemos padecido pero ¿es una verdadera enfermedad?
Que te maltraten en el trabajo es evidente que es un problema y que de él pueden derivarse diversas enfermedades mentales. ¿Quién no lo ha experimentado? Pero ¿qué es antes el huevo o la gallina? Parece claro que aquí lo que viene primero son los gritos del jefe, la presión por cumplir con los objetivos, el exceso de horas de empleo, la amenaza del despido o el estrés generado por una excesiva carga de trabajo.
Así que primero es un problema social, laboral, económico por el sistema o modelo establecido. Político también.
Me hace gracia que algunos medios traten el tema como de «desgaste laboral» como si los trabajadores fuésemos los que no aguantamos la presión lo suficiente en vez de estar inmersos en un sistema laboral opresivo per se y en el que la mayor parte de la personas sólo cuentan como «fuerza de trabajo» y no para gestionar esas condiciones laborales que enferman.
Son las malas condiciones laborales las que queman a un empleado y claro, sí, luego vienen los problemas de salud mental que entre otras cosas no te permiten rendir como es debido (pero para algunos qué más da, hay tantos trabajadores «kleenex»; empleados de «usar y tirar» ¿verdad?).
De manera paradójica clasificar como «enfermo» a un trabajador quemado tiene también su punto de animar el mercado de trabajo. Sí, porque por ejemplo los sistemas sanitarios tendrán más atribuciones. Para atender a los neoenfermos -esos pobres debiluchos que no resisten la presión de un mercado laboral perverso, enfermo-, harán falta muchos psicólogos y psiquiatras y demás profesionales sanitarios.
Y también un arsenal de medicamentos ansiolíticos y antidepresivos supongo. Si su consumo aumenta en épocas de crisis es por algo y si ahora se oficializa que el no aguantar lo inaguantable es enfermedad pues ya con más motivo ¿no? ¿Veremos en breve gabinetes neuropsicológicosespecializados en burn-out? Seguro.
El burn-out no es una enfermedad mental pero es obvio que sí hay un sufrimiento emocional importante.
Como cuenta en un foro privado un médico al que tengo especial respeto:
El «desgaste profesional» ha sido incorporado a la sección de «problemas asociados» al empleo o al desempleo. Llevará el código QD85. Está descrito como:
Nada dice sobre el modelo económico social en el que se inserta el trabajo. Si no te adaptas a un modelo enfermo estás enfermo.
Me ha impactado el testimonio del médico que comento porque se convierte en sanitario un problema que también crea en sus trabajadores el sistema sanitario donde el nivel de quemados las diferentes estadísticas que se hacen lo sitúan en torno al 50%:
Por si a los quemados os sirve de consuelo sabed que el filósofo Jiddu Krishnamurti dejó escrito aquello de que no es signo de buena salud el estar bien adaptado a una sociedad profundamente enferma.