Boris Johnson y Jeremy Hunt, candidatos finales para suceder a May al frente del Partido Conservador
El exministro de Exteriores y el actual canciller deberán ahora conquistar el voto de los 160.000 militantes 'tories', un proceso que acabará a finales de julio.
Sólo podían quedar dos, y ya tenemos sus nombres: Boris Johnson, exministro de Exteriores y antiguo alcalde de Londres, y el actual canciller británico, Jeremy Hunt, son los políticos que aspiran finalmente a suceder a Theresa May al frente del Partido Conservador y, de paso, del Gobierno de Reino Unido.
Johnson, claro favorito en las encuestas, recibió el respaldo de 160 de los 313 diputados conservadores, por delante de Hunt, que obtuvo 77 apoyos, mientras que el tercer aspirante que optaba a acceder a la última ronda de las primarias, el titular de Medioambiente, Michael Gove, quedó eliminado al sumar 75 votos; apenas dos de diferencia, tras una remontada espectacular en los últimos días que al final no le ha servido para nada.
Ahora, Johnson y Hunt deberán someterse a una elección entre los cerca de 160.000 militantes del partido, cuyo resultado se conocerá a finales de julio.
I’m deeply honoured to have secured more than 50 per cent of the vote in the final ballot. Thank you to everyone for your support! I look forward to getting out across the UK and to set out my plan to deliver Brexit, unite our country, and create a brighter future for all of us. pic.twitter.com/i5D4ByurAM
I'm the underdog - but in politics surprises happen as they did today. I do not doubt the responsibility on my shoulders - to show my party how we deliver Brexit and not an election, but also a turbo-charged economy and a country that walks tall in the world
Los afiliados conservadores votarán por correo durante las próximas cuatro semanas entre los dos finalistas para elegir al nuevo líder de la formación, que heredará asimismo el despacho del número 10 de Downing Street que dejará vacante Theresa May.
La todavía jefa del Ejecutivo, que ganó unas elecciones generales en junio de 2017, anunció a finales de mayo su intención de dimitir, tras fracasar en tres ocasiones sus intentos de aprobar en el Parlamento el acuerdo del Brexit al que había llegado con Bruselas.
El proceso para sustituirla empezó oficialmente el 10 de junio, cuando diez diputados conservadores se presentaron para aspirar al liderazgo tory y la jefatura del Gobierno británico.
Partidarios de renegociar
Tanto Johnson como Hunt son partidarios de renegociar ese pacto, en particular la polémica cláusula para evitar una frontera en Irlanda del Norte, a pesar de que la Unión Europea (UE) se ha mostrado hasta ahora contraria a modificar sus términos.
El exalcalde de Londres asegura que materializará la ruptura con el bloque comunitario el próximo 31 de octubre si llega a ser primer ministro, con o sin acuerdo, mientras que el titular de Exteriores deja la puerta abierta a pedir una extensión de ese plazo.
La decena de contrincantes en liza desde el inicio recalcaron la necesidad de cumplir con el nuevo calendario del Brexit -el 31 de octubre-, tras la abrumadora victoria obtenida por el antieuropeo Partido del Brexit de Nigel Farage en las recientes elecciones al Parlamento europeo.
Las cosas de Boris Johnson
Manejando una grúa durante una visita a las obras de un puerto en Blackpool
Efectivamente, dentro de un caza de las fuerzas aéreas británicas (RAF)
Podría ser una foto más, pero se trata de una visita al centro de control donde se estaba construyendo una central nuclear
Quizás no era la mejor forma de posar durante su visita a la India.
En su visita a la India aprovechó para saludar a una deidad
Si hace falta pinta él las líneas del campo de juego, como en esta visita al césped del Bury FC
A los mandos de un brazo robótico, echando una mano durante una visita a un centro de FP de Burnley
Johnson, haciendo algo extraño con las manos durante una conexión en directo con el presidente ucraniana, Volodímir Zelenski
Johnson disfrutando de los cuadros del Museo de Prado antes de la cena de líderes por la Cumbre de la OTAN en Madrid
Están todos contados, Boris. Y conocemos el catálogo del British Museum
'¿El parecido es razonable?'. Fuera bromas, es un retrato de la reina de Inglaterra.
Y sí, el retrato lo hizo él.
No estamos seguros de si está preguntando si lo tienen en un tamaño más grande, pero este es un momento de su visita a una fábrica militar en Belfast
¡No, por favor! Decidnos que eso está descargado.
Ojalá supiésemos qué le ha dicho este niño de una escuela de Kent a Boris Johnson
Johnson, en la misma visita a la escuela de Kent, pero tras 'pasar de curso'
Una auténtica rareza en su carrera política, en esta imagen está dimitiendo
Johnson en una fotografía tomada el 13 de noviembre de 2020, durante la pandemia, en lo que aseguró que era una "reunión de trabajo"
Johnson, ayudando a un estudiante de fontanería de un centro de Blackpool con las medidas de un tubo
Johnson, en el mismo centro educativo, pero esta vez poniendo su granito de arena para terminar un muro
A punto de embarcar hacia Kiev para visitar al presidente ucraniano, justo después de que saliese publicado el informe del 'partygate'
Vale, en esta no sale Johnson, pero esta es la cara del gato Larry (la mascota de Downing Street) el mismo día en que Boris dimitió
Johnson, a punto de cortar un pepino recogido de una granja de Cornwall por él mismo. Y bajo la atenta mirada de preocupación de su acompañante.
Johnson, visiblemente satisfecho por la producción británica de brécol.
Johnson, durante una visita a una escuela de Kigali (Ruanda) y, al parecer, es el único que no sabe la respuesta a la pregunta.
Las mil caras (y gestos) de Boris Johnson. Un personaje popular y populista que ha dejado no pocas imágenes 'sui géneris'. Y es que jugando a la cuerda con traje, corbata y zapatos la cosa pintaba fea.
Johnson, ¿dejándole paso? al canciller federal alemán Olaf Scholz en un paseo durante la última reunión del G7
Johnson, nada agobiado por la presencia de periodistas antes de aterrizar en Madrid para asistir a la Cumbre de la OTAN 2022
No solo se le ve practicando deportes, también (hace que) trabaja, como en esta imagen.
Un poco de "running" con bermudas de playa. Peligrosa mezcla.
En su etapa de alcalde de Londres se implicó mucho en promocionar deportes como el rugby de cara a los Juegos Olímpicos. Quizá demasiado. Pobre niño...
Pero en un plano más "serio", fue uno de los grandes referentes de la campaña por el "Sí al Brexit". Por supuesto, su campaña fue "a lo Boris Johnson".
En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.
No sabemos si es fan de Pink Floyd, pero aquí hizo un guiño a su "Another brick in the wall".
Otro momento deportivo; ahora toca cricket.
Y con la vuvuzela, que tan popular se ha hecho en los últimos mundiales de fútbol.
Si tenía que mojarse por un tema, lo hacía. Literalmente.
Otro momento rugbístico en una sesión de "entrenamiento" grupal.
Un gesto de extraña explicación en plena comparecencia.
Su look con ese flequillo despeinado a veces le ha jugado malas pasadas.
Indefinible.
¿Un remake de "Los gemelos golpean dos veces"?
Si es lo que parece, el voleibol paralímpico no se le da muy allá.
Rugby, voleibol, atletismo... y un poco de tenis, como en este partido benéfico en Queen's.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
146
Visitó la India y esta foto era absolutamente inevitable
Las mil caras (y gestos) de Boris Johnson. Un personaje popular y populista que ha dejado no pocas imágenes 'sui géneris'. Y es que jugando a la cuerda con traje, corbata y zapatos la cosa pintaba fea.
En su etapa de alcalde de Londres se implicó mucho en promocionar deportes como el rugby de cara a los Juegos Olímpicos. Quizá demasiado. Pobre niño...
Pero en un plano más "serio", fue uno de los grandes referentes de la campaña por el "Sí al Brexit". Por supuesto, su campaña fue "a lo Boris Johnson".
En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.