Bolaños: "La OTAN es hoy sinónimo de seguridad y paz y se lo digo a quien se ponga por delante"
El ministro de la Presidencia replica a sus socios que los contratos de la cumbre son legales. Garzón se desmarca y los defiende también por su "pulcritud".
El ministro de la Presidencia, el socialista Félix Bolaños, ha defendido esta mañana el valor de la OTAN y de la presencia de España en la organización defensiva. Ante la ausencia de sus socios de Gobierno de Unidas Podemos en los actos por el 40º aniversarios de la adhesión española a la Alianza y sus críticas a su papel, Bolaños ha enfatizado que se ha convertido “en un espacio que garantiza nuestra seguridad, garantiza nuestra libertad y garantiza nuestros valores”.
En una entrevista en Onda Cero, el periodista con Carlos Alsina le ha consultado si defiende esa misma postura incluso ante sus compañeros del Consejo de Ministros, a lo que Bolaños ha respondido: “Se lo digo a quien se ponga por delante y se lo digo, por supuesto, también a nuestros socios”. Insiste en que la OTAN es sinónimo “seguridad y paz” y que eso es un hecho innegable, más allá de que otras opiniones sean “muy respetables”. Ha puesto como ejemplo la reciente petición de Suecia y Finlandia de entrar en la Alianza Atlántica como ejemplo de que cada vez hay más estados que confían en su protección.
Alsina le ha preguntado también por la crítica de Podemos a los contratos para celebrar en Madrid, a finales de mes, la cumbre de la OTAN. Sostienen que se han adjudicado sin concurso público, a dedo, hasta 37 millones de euros para la organización del evento. “Claramente no fue la afirmación más afortunada que hicieron las personas que la profirieron”, ha descartado Bolaños. A su entender, el contrato es “absolutamente legal”. Fue de emergencia porque el tiempo apremia y “no hay tiempo material” y en la ley de contratación española -que deriva de una directiva europea, dice- se contemplan estos supuestos. “Es que nosotros somos un Gobierno decente, somos un Gobierno honrado. Por tanto, en nuestros contratos no hay problema”, concluye.
Justo en otra entrevista, esta vez en RNE, el ministro de Consumo y líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha defendido la “pulcritud administrativa plena” del contrato aprobado por el Consejo de Ministros para la celebración de la cumbre de la OTAN. No comparte las críticas de Podemos, ha dicho con claridad. En declaraciones a RNE, recogidas por Europa Press, ha desgranado que dichos contratos se hicieron “de acuerdo a la ley” y, por tanto, en absoluto alberga dudas sobre la transparencia en la actuación del Ejecutivo.
De esta forma, Garzón comparte la posición que ayer expresó la vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, Yolanda Díaz, quien se desmarcó también de Podemos y afirmó que la adjudicación cumple “con todos los requisitos de legalidad”.
Cuestionado sobre si le sorprendió el posicionamiento crítico de Podemos a la decisión del Consejo de Ministros sobre dicho contrato, Garzón ha recalcado que corresponde a la formación morada “acreditar por qué han hecho esta afirmación”. “Yo desde luego no la comparto”, ha enfatizado.
Diferencias que no afectan al Ejecutivo
Por otro lado, Garzón ha señalado que existen posiciones críticas sobre la función de la OTAN como es el caso de IU, organización que se fundó en 1986 “al calor de las movilizaciones” contra la Alianza Atlántica, y en cuya cultura política “siempre ha habido claramente la conciencia de que la OTAN sea un instrumento para resolver los problemas en una línea de paz y solidaridad entre pueblos”.
No obstante, Garzón ha indicado que IU piensa de esta forma pero forman parte de un espacio político en el que “no todo el mundo piensa exactamente igual” y que hay gente que “no lo tiene tan claro” y tienen “dudas” que son razonables en el actual contexto de la guerra de Ucrania.
Eso sí, ha descartado que estas diferencias con el PSOE sobre el papel de la OTAN afecten al Ejecutivo, puesto que prima su compromiso con un Gobierno que prima el despliegue de políticas que favorecen a la clase trabajadora.
También ha apuntado que es necesario normalizar que en el seno de un Ejecutivo compartido por dos fuerzas políticas haya diferencias políticas y ha enmarcado el ruido que producen se debe a la “ausencia de la cultura de la coalición” en España, a diferencia de lo que ocurre en otras naciones como Bélgica.
“Pensamos que el Gobierno de coalición debería estar de acuerdo en todo en un gobierno de coalición, cosa que es literalmente imposible por ser diferentes fuerzas políticas”, ha ahondado Garzón para instar a no hacer “una montaña” de cada discrepancia que se suscita entre los socios.
De hecho, Garzón ha reivindicado que a pesar de la “crispación” y un contexto que dificulta los acuerdos, el Ejecutivo y la mayoría parlamentaria progresista ha logrado sacar adelante más de 140 leyes, lo que arroja un saldo neto “muy favorable”