Bárcenas cree que Rajoy ordenó la operación Kitchen
El extesorero del PP, que se ha negado a declarar, dice que es el "primer interesado" en comparecer ante los diputados cuando pueda.
La comparecencia de Luis Bárcenas en el Congreso se ha convertido en un caramelo demasiado apetitoso para los partidos como para dejarlo pasar. Pese a que el extesorero del PP se ha acogido a su derecho a no declarar para no perjudicar la investigación judicial de la operación Kitchen, pronto ha lanzado jugosos titulares para la batalla política. Y para los medios.
Bárcenas ha cargado contra el expresidente Mariano Rajoy, a quien ha señalado como autor intelectual de la operación en la que supuestamente se usaron fondos del Ministerio del Interior para robarle documentos que comprometían a varios dirigentes del PP. “Es una suposición, pero así lo creo”, ha zanjado.
Las palabras del extesorero, que ha declarado —no sin problemas técnicos—, desde la prisión madrileña de Soto del Real, no han debido sentar nada bien al PP. Su portavoz en la comisión, el diputado Luis Santamaría, se ha negado a preguntar nada su otrora compañero. Y ha dado carpetazo a su intervención asegurando que la comisión es una “causa general” contra el PP. Las mismas palabras que usó Rajoy hace casi ocho años cuando trascendieron los ‘papeles de Bárcenas’.
Lo cierto es que Bárcenas está cansado de esa coletilla. No son sus papeles, ha dicho, “son los papeles del Partido Popular”. Los partidos presentes en la comisión, dado que el extesorero no ha contado nada sobre Kitchen, han desviado han pasado a preguntarle por la caja ‘b’ del PP. Por eso, el extesorero ha repetido hasta la saciedad que la “contabilidad extracontable” es real como la vida misma. “Son ciertos completamente. Todo lo que hay apuntado ahí es real”, ha respondido al diputado de ERC Gabriel Rufián.
El extesorero ha comenzado su intervención ante sus señorías dejando claro que se acogía a su derecho a no declarar para no perjudicar la causa de Kitchen, porque parte de ella es todavía secreta. Pero sí ha respondido a algunas de las preguntas que le ha formulado el portavoz del PSOE, Felipe Sicilia. Y también el resto de portavoces de los principales grupos, desde Pablo Echenique, de Podemos, a Macarena Olona, de Vox, pasando por el republicano Rufián y el naranja Edmundo Bal.
Bárcenas ha dado su opinión sobre las personas que supuestamente orquestaron la operación, aunque no ha contestado abiertamente quién ordenó el allanamiento de su casa o el secuestro de su familia.
El primero al que ha señalado ha sido al exministro del Interior popular Jorge Interior Fernández Díaz. Fue él, según las elucubraciones del extesorero, quien ordenó la operación al ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez. “Y siguiendo con las suposiciones”, ha dicho Bárcenas, Fernández Díaz actuó siguiendo las órdenes de “la cúpula del PP y de Mariano Rajoy”. Bomba.
Durante la comparecencia, Bárcenas se ha encargado de resucitar un viejo fantasma: el de la grabación a Rajoy. Fue el extesorero quien la hizo y poco después le fue supuestamente sustraída por el operativo de Kitchen. Y en ella, cuenta, se escuchaba cómo entregaba dinero a Mariano Rajoy de la presunta caja ‘b’. Pero no solo dinero, también unos documentos con la contabilidad que el expresidente del Gobierno, según su versión, destruyó nada más llegar a sus manos.
El problema para el espectáculo político es que Bárcenas no ha soltado prenda a los diputados que le han hecho las grandes preguntas que se dirimen en la causa de Kitchen. Pero, para tranquilidad del circo mediático, sí ha lanzado un aviso a navegantes: “Una vez que se abra juicio oral, estoy a disposición de la comisión, el primer interesado en que este tema se pueda averiguar soy yo”.
“Soy el primer interesado en saber si la cúpula del PP intentó organizar el robo de información y el secuestro de mi familia [a manos de un falso cura]”, ha respondido Bárcenas al portavoz socialista Felipe Sicilia, quien le ha preguntado por el material que tenía y a quién podía perjudicar. Pero no ha habido manera. Bárcenas no ha dicho ni pío y se ha basado en que el caso todavía tiene varias partes secretas.
Al poco de arrancar el show en la Carrera de San Jerónimo, ha trascendido que Bárcenas, que cumple 29 años por el caso Gürtel, ha obtenido su primer permiso penitenciario de 12 días. Cuando el extesorero se ha quitado la mascarilla para declarar, se ha intuido una leve sonrisa. No es para menos, pues podrá disfrutar del permiso en dos períodos de 6 jornadas tras recibir el aval del juez de vigilancia penitenciaria de la Audiencia Nacional en contra del criterio de la Fiscalía.
La comparecencia del extesorero popular ha comenzado con problemas de audio que casi se llevan por delante la comisión y que han impedido a los diputados escuchar con claridad sus palabras. Por eso, la presidenta de la comisión, la socialista Isaura Leal, la ha tenido que suspender durante 15 minutos, para que los servicios de la Cámara mejoraran el sonido.
Bárcenas ha recordado a los diputados que el juez instructor García Castellón ya indicó a la presidenta de la comisión el carácter “reservado” de las actuaciones y ha destacado que las dos veces que ha declarado en esta causa como perjudicado, el juez le ha señalado el secreto de las actuaciones. Por eso no puede revelar nada de su declaración.
La representante de Vox y portavoz en la comisión, Macarena Olona, ha sido muy dura con Bárcenas, a quien ha acusado de mentir y defender versiones contradictorias ante el juez y ante los diputados. Olona ha dejado caer que Bárcenas habría pactado el contenido de su declaración con algunos de los imputados en el caso.
Ambos han protagonizado tensos rifirrafes. En uno de ellos, Bárcenas ha dado un zasca a Olona: “Lo que dice es una auténtica estupidez”, le ha espetado tras escuchar una de las preguntas que le planteaba y que se ha negado a responder. Bárcenas en estado puro.