Aznar sobre los independentistas: "Hay que derrotarlos, no podemos convivir permanentemente con un golpe de Estado"
Para el expresidente, la situación que atraviesa Cataluña es algo que ya se ha vivido en España con anterioridad.
El expresidente del Gobierno José María Aznar, ha querido advertir de las consecuencias que los resultados electorales tras las elecciones del 10 de noviembre pueden tener para la actual situación en Cataluña. En este sentido ha destacadi que hay que derrotar al independentismo porque no se puede convivir permanentemente con un golpe de Estado.
El político popular ha explicado que las respuestas a la situación en Cataluña van a depender de lo que voten los ciudadanos el próximo domingo. “Vamos a tener lo que decidamos tener. Si queremos una situación política ingobernable, la podemos tener. Si queremos dirigentes que enfrenten el desafío, los podemos tener”, ha sostenido durante un acto que ha protagonizado junto con el director del diario “El Mundo”, Francisco Rosell
En este sentido, el que fuera jefe del Ejecutivo ha asegurado que los resultados de las elecciones serán responsabilidad de los votantes, y también las acciones que el futuro gobierno lleve a cabo. “Midamos cuáles son, porque nos puede llevar por caminos muy distintos”, ha añadido.
Para el expresidente, la situación que atraviesa Cataluña es algo que ya se ha vivido en España con anterioridad. “En el País Vasco, en los años 90, no sólo enfrentamos al terrorismo, sino que movilizamos a la sociedad”, ha aseverado.
En este contexto, Aznar ha recordado las manifestaciones celebradas, por ejemplo, tras el asesinato del concejal del Partido Popular Miguel Ángel Blanco a manos de los terroristas.
“A los golpes de Estado hay que derrotarlos”
“En Cataluña hace falta una política nacional con continuidad en el tiempo y que deje muy claro que es imposible la ruptura de la unidad de España”, ha apuntado, para después señalar que eso “requiere de un liderazgo muy importante” que no existe en el panorama político actual.
Así, Aznar ha puesto de ejemplo la situación que tuvo que enfrentar el expresidente de los EEUU Abraham Lincoln, que “no aceptó la división” del país.
“Lo afrontó con todas sus consecuencias, que fueron desagradables: una guerra civil y 300.000 muertos. Pero eso salvo a los EEUU. No estoy diciendo que se vayan a dar las mismas circunstancias, pero si queremos salvarlo, lo que no podemos hacer es convivir permanente con un golpe de Estado. Hay que derrotarlos”, ha remachado.
