Estos son los deberes que le ha puesto Aznar a Casado
FAES advierte de la importancia de una oposición "creíble" y con proyecto.
Pablo Casado, a apuntar. La Fundación FAES, que preside José María Aznar, advierte en su último editorial de la “extraordinaria importancia” que tiene para España contar con una oposición que “sea alternativa y se ofrezca de manera creíble como el cambio necesario y razonable”.
Esta es, según FAES, la única posibilidad para frenar a un Gobierno que “daña las instituciones, enfrenta a los españoles y deteriora sus derechos, devalúa la posición internacional de España y utiliza la propia cohesión nacional como partida de negociación para permanecer en el poder”.
Así, ante la “debilidad” y sometimiento del Gobierno de Pedro Sánchez a las exigencias meramente “extractivas” de sus socios la oposición debe presentar un proyecto “propositivo” sostenido sobre los “buenos modelos de gobierno territorial a los que hay que añadir la propuesta de conjunto” para todos los españoles que “desmienta a los que creen que en la fragmentación política o territorial se encuentran ahora las oportunidades”.
Se trata así de “elegir entre agravar el actual modelo, disfuncional, extractivo e injusto, o recuperar las instituciones democráticas para el interés general”.
“Anomalía política”
Para FAES, la “anomalía política” de España se debe a la existencia de un Gobierno “cuya fuerza radica simplemente en su debilidad” y en el hecho de que Sánchez es el “candidato preferido sin rival de todo lo marginal, desleal y destructivo que ha generado la política española hasta la fecha” y que se une entorno al PSOE porque sus socios “creen que todavía pueden extraer más de este filón”.
Así las cosas, el Gobierno “no tiene más horizonte que esperar a que el rescate blando proporcionado a España por la Unión Europea se mantenga hasta el final de la legislatura y lo haga en condiciones tan benévolas como las actuales”, de modo que le permitan seguir actuando “sin someterse a disciplina alguna que ponga en peligro la piñata con la que disfrutan sus socios y mantiene el andamiaje de la coalición Frankenstein”, advierte el editorial.