Ayuso presume de que Puig copia las rebajas fiscales de Madrid pero se le olvida este detalle
Un gran detalle si eres rico.
El presidente de la Comunidad Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha anunciado este martes la implementación de un importante paquete de medidas en materia de rebajas fiscales. Se trata de una serie de iniciativas que beneficiarán de forma directa a 1.344.000 valencianos, es decir, todos los que cobran menos de 60.000 euros y que representan el 97,4% de los contribuyentes en dicha comunidad.
Momentos después de que fuesen anunciadas las medidas, su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso se ha pronunciado desde su cuenta de Twitter. Ayuso ha criticado que “la ministra [de Hacienda, María Jesús Montero] anuncia subidas de impuestos” y que “Puig despreciaba esa política y ha terminado bajando impuestos”, deslizando que la Comunidad Valenciana opta por una línea fiscal “como lo hacemos en Madrid desde hace 18 años”.
Ayuso también ha pedido a los socialistas que aclaren qué política fiscal defienden en las comunidades autónomas y en el Gobierno de España. Preguntada por los periodistas, a la salida de la entrega de Premios AEDHE a la Excelencia Empresarial 2022, en Alcalá de Henares, ha señalado que esto se “venía venir” porque “la semana pasada ya estuvieron insultando” al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, “llamándole todo tipo de cosas”. “Predije que esto era el preludio de una bajada de impuestos”, ha apuntado la dirigente madrileña.
La diferencia de la rebaja fiscal de Madrid y la C. Valenciana
Aunque el choque en materia de tributos de la Comunidad Valencia y Madrid es de sobra conocido -Puig llegó a acusar a Ayuso de realizar dumping fiscal-, lo cierto es que los tres ejes de la rebaja fiscal que ha anunciado el president de la Generalitat valenciana cuentan con una gran diferencia respecto a la línea que ha seguido Madrid en los últimos años.
La medida estrella que caracteriza a la comunidad madrileña en materia de baja presión fiscal es la bonificación del Impuesto de Patrimonio al 100%, lo que supone la práctica desaparición de un tributo que afecta a las rentas más altas. Se trata de una medida a la que el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, ha incorporado a su región la semana pasada con el objetivo de captar a grandes fortunas para que tributen allí.
En su discurso, el propio Puig lo ha remarcado, el ajuste fiscal en la Comunidad Valenciana no afectará al Impuesto de Patrimonio. De hecho, la clave del paquete de medidas anunciado es que solo beneficiará a las rentas medias y bajas, en un claro gesto ante los efectos derivados de la crisis energética, como la espiral inflacionista que afecta a los precios de numerosos productos.
En este sentido, en Madrid sólo aquellas personas que superen los dos millones de euros de patrimonio están obligados a presentar la declaración del impuesto. Eso sí, sin ingreso.
Al mismo tiempo, el sucesor de Alberto Núñez Feijóo al cargo de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, también ha anunciado que se deflactarán los tres primeros tramos del IRPF, es decir a rentas menores a los 35.000 euros. También se trata de una nítida iniciativa centrada en las clases baja y media. En el caso gallego, ya se había adelantado una bonificación del 50% para los contribuyentes con un patrimonio superior a los dos millones de euros.