El PP se retuerce con las polémicas y el apartamento de Ayuso: “Hace daño al partido y a Casado”
Dirigentes territoriales y alcaldes, preocupados por la situación de la presidenta madrileña: "Sería una derrota del líder".
El sábado por la noche dirigentes y cargos del PP no paraban de mandar y recibir whatsapps. No daban crédito a unas imágenes: la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de negro y posando como si fuera una Virgen en la edición de El Mundo que saldría en papel en unas horas. En plena pandemia. Barones y alcaldes se preguntaban si eran necesarias esas fotografías y qué sentido tenían en un momento así.
Pero entonces nadie sabía el bombazo mediático que llegaría apenas 48 después: se publicaba en Vanity Fair que Ayuso estaba residiendo en un apartamento de lujo en pleno centro de Madrid a precio de amigo. 80 euros por noche en un establecimiento de Room Mate, propiedad del empresario Kike Sarasola, y al que por “error”, según la Comunidad, se le había atribuido un contrato fantasma de 565.649 euros.
En el PP todos opinan que Ayuso ha crecido políticamente durante la pandemia y se ha convertido en la líder autonómica más crítica con el Gobierno de Pedro Sánchez. Pero lejos está para el resto del partido ser ese “icono” del que hablaba Casado el pasado lunes. Las críticas crecen a lo largo y ancho de España sobre la gestión que está teniendo la presidenta de la Comunidad de Madrid, según fuentes del partido consultadas por El HuffPost.
Así lo resume de manera tajante un alto cargo regional del PP: “Sus errores hacen daño al PP en general y a Casado en particular”. Para cargos autonómicos y locales, las polémicas de Ayuso debilitan el discurso de su líder de ejemplaridad y transparencia, así como las acusaciones de Génova 13 sobre las supuestas mentiras de Pedro Sánchez ante la falta de explicaciones concretas de la líder madrileña sobre el apartamento.
Al propio Casado se le ha notado esta evolución durante estos días: del “icono” a Ayuso que dijo este lunes a una defensa menos pretoriana este jueves en El Programa de Ana Rosa, en el que ha dicho que se trata de un “ámbito privado” y que la presidenta madrileña lo pagará de su bolsillo. Además, ha estado especialmente incómodo cuando ha tenido que responder sobre las fotografías de la portada de El Mundo.
La propia Ayuso comentó también que en algún momento de la sesión no estuvo cómoda, pero el resultado es que permitió el posado. Todo dentro de su estrategia agresiva de comunicación capitaneada por el polémico exportavoz del Gobierno de José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, Un estilo que difiere totalmente de otros barones del PP como Juanma Moreno (Andalucía) y Alberto Núñez Feijóo (Galicia), que buscan un perfil más de Estado.
Pero precisamente Casado no está por la labor de dejar caer a Ayuso. Lo saben todos en el partido. “Fue un empeño suyo”, como explica durante una conversación otro dirigente territorial. Por lo que muchos creen que el líder del PP respaldará a su designada, una apuesta personal que muy pocos veían cuando fue anunciada antes de las elecciones autonómicas del pasado año.
Las fuentes consultadas también advierten de que a sus ojos Ayuso está viviendo un gran campaña de “acoso” por parte de los otros partidos y de parte de la prensa para desgastar al PP y a ella por ser la voz más dura contra Sánchez. Y algunos ven detrás también maniobras del propio socio de gobierno de Ciudadanos, ya que las relaciones con Ignacio Aguado no son precisamente buenas.
Pero la sensación interna no es de esa heroína que quieren fabricar en Génova 13 y en la Puerta del Sol. “Este episodio, las fotos de El Mundo, algunas de sus declaraciones, anodina… y eclipsada por Almeida”, suspira un cargo territorial del Partido Popular. Todo ello también removido por el culebrón de la semana pasada cuando se intentó pasar a la fase 1 en un clima de confrontación con el Gobierno central y con la dimisión de la directora general de Salud Pública por no querer firmar los documentos contrarios a criterios sanitarios.
Estos días también sobrevuela una sombra por la Puerta del Sol, la de Cristina Cifuentes. Aquellos días de mentiras sobre el máster y la imagen de las cremas que hicieron dimitir a uno de los pesos pesados del Partido Popular. ¿Podría suceder los mismo ahora? Las fuentes consultadas creen que todavía “es pronto” para saber esto. E inciden en una diferencia: Cifuentes no gozaba ya del apoyo de Rajoy y su entorno, en tanto que ahora Ayuso es una persona muy cercana al hoy líder del PP.
Sospechas en el PP madrileño sobre Cs
“Sería una derrota de Casado”, señala un dirigente popular. Además, varios cargos territoriales coinciden en que tampoco están el Gobierno central y el PSOE “para tirar cohetes” y presionar lo suficiente para hacer caer a Ayuso. Muchas miradas en el PP se posan también sobre Ciudadanos al respecto, pues acaba de arrancar una nueva etapa con Inés Arrimadas al frente apoyando al PSOE en una nueva prórroga del estado de alarma.
De todas formas, Casado confía en su buena relación con ella y se fía de las declaraciones que ha hecho en los últimos días la ‘naranja’ sobre que se van a quedar con las ganas aquellos que quieren ver rotos los gobiernos autonómicos PP-Cs, como el de Madrid. El vicesepresidente madrileño, Ignacio Aguado, ha descartado una moción de censura a pesar de las desavenencias manifiestas con la ‘popular’. Ese aire se sigue respirando, con varios populares con la mosca detrás de la oreja sobre posibles filtraciones de Cs. Sin nombrarlo públicamente, se mira con lupa al consejero ‘naranja’ de Asuntos Sociales, Alberto Reyero.
Cada vez que habla Ayuso, todo el mundo habla… y mucho entre los suyos.