Dile adiós a AstraZeneca: su vacuna pasa a llamarse Vaxzevria
La compañía opta por un 'lavado de cara' ante la crisis reputacional por los efectos secundarios asociados a su medicamento.
En el ‘abecedario’ del coronavirus, la A tiene un dueño más que evidente: AstraZeneca. La farmacéutica británica responsable de una de las vacunas aprobadas internacionalmente se ha convertido en protagonista de los últimos meses y pocas veces para bien. Este motivo ha llevado a la empresa a adoptar una decisión radical: cambiar su nombre.
La aparición de síntomas negativos, principalmente trombos, en pacientes vacunados con este fármaco y la suspensión temporal de su administración en países como España, Francia y Alemania ha obligado a un ‘lavado de cara’. A partir de ahora, la vacuna pasa a llamarse Vaxzevria.
La Agencia Europea del Medicamento ha autorizado el cambio legal y ya recoge en sus documentos la nueva denominación de este medicamento basado en tecnología de ADN y una pauta de dos dosis. Su composición y posología no van a cambiar, aseguran desde la compañía (que sí seguirá llamándose AstraZeneca). Únicamente es lo que ahora llaman rebranding para limpiar el sello de la casa.
Alemania vuelve a limitar su uso
Este martes, Alemania anunció su suspensión para menores de 60 años después de notificar 31 casos de trombos en pacientes vacunados, especialmente mujeres menores de esa edad límite. En contraste, la Comisión de Salud Pública avaló utilizarla en personas de más de 65 años en España en casos de profesionales esenciales. Hasta ahora, el límite estaba en los 65.
De acuerdo con los datos de Sanidad, ya se han inoculado 1.469.598 dosis de las 2.060.500 recibidas en España. La pauta completa de dos tomas se ha completado únicamente en 60 personas, ya que exige entre diez y doce semanas entre dosis y dosis.