Así es el Colegio Mayor Elías Ahúja: cuesta 1.190 euros al mes con limpieza de habitaciones y lavandería
Sus residentes están señalados tras difundirse de forma masiva un vídeo donde varios de ellos gritan por la ventana comentarios e insultos machistas
El colegio mayor Elías Ahuja, adscrito a la Universidad Complutense de Madrid y que sólo admite a estudiantes varones, se ha convertido en estas últimas horas en el centro de la polémica por un vídeo viral donde varios de sus alumnos gritan a través de la ventana comentarios machistas a alumnas de un colegio vecino.
Los hechos ocurrieron en la noche del domingo pasado cuando varios jóvenes residentes en dicho colegio se asomaron a las ventanas del centro y uno de ellos -que ya ha sido expulsado por la dirección del colegio- empezó a gritar e insultar a las estudiantes del cercano Colegio Mayor Santa Mónica. “Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas, sois unas putas ninfómanas, os prometo que vais a follar todas en la capea, ¡vamos Ahuja!”, dijo. Tras ello, se levantaron a la vez las persianas de todas las habitaciones de la siete plantas de una las fachadas del colegio y los estudiantes asomados comenzaron también a proferir cánticos machistas.
La dantesca escena ha hecho que hasta el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, haya escrito un tuit mostrando su repulsa. “No podemos tolerar estos comportamientos que generan odio y atentan contra las mujeres. Es especialmente doloroso ver que los protagonistas son personas jóvenes”, ha subrayado el jefe del Ejecutivo.
El Colegio mayor ha expulsado al principal promotor de esta acción y ha abierto investigación para “analizar lo ocurrido y dirimir responsabilidades”. Además, obligará a todos sus residentes a participar en conferencias de sensibilización y en voluntariados sociales.
174 estudiantes en habitaciones individuales
El Elías Ahuja está gestionado y dirigido por los Padres Agustinos de la Provincia Matritense del Sagrado Corazón de Jesús. Se inauguró el 6 de octubre de 1969 y por esta institución han pasado unos tres mil universitarios, “educados en valores humanos y cristianos por medio de la convivencia, la cultura, el deporte y la solidaridad”, según dicen sus propietarios.
Actualmente proporciona alojamiento a 174 estudiantes universitarios, todos varones. Todas las habitaciones son individuales salvo una doble y están dotadas con teléfono, acceso a internet por fibra óptica (cable y Wi-Fi), lavabo y ducha (algunas con baño completo). Los residentes disfrutan de pensión completa, servicio de lavandería y una limpieza de habitación dos veces por semana, incluyendo cambio de sábanas.
El colegio mayor cuenta además con una biblioteca, un aula de informática, otro de fotografía, una sala de audiovisuales, un gimnasio, un teatro con capacidad para más de 500 personas, una sala de televisión para ver partidos de fútbol, una capilla y una pista polideportiva para la práctica de fútbol sala, baloncesto, balonmano, voleibol y tenis.
En cuanto a su coste, el precio por alumno en el curso 2020/2021 era de 1.190 euros, IVA incluido. “El impago de cualquiera de las cuotas mensuales, tras realizar dos notificaciones a los padres o tutores, supondrá la pérdida de la plaza y por tanto la expulsión del colegial y la consiguiente pérdida de la fianza”, señalan en sus estrictas normas en cuanto a la parte económica.
Vídeos polémicos y un Pablo Casado como ‘macho ibérico’
No es la primera vez que los residentes de este colegio mayor protagonizan vídeos machistas o, incluso, de exaltación nazi. El periodista Antonio Maestre ha rescatado en su cuenta de Twitter grabaciones de cursos anteriores donde se puede ver a jóvenes entonando canciones vejatorias contra las mujeres e incluso haciendo el saludo fascista.
Uno de sus alumnos estrella ha sido Pablo Casado, que años después se convertiría en presidente del PP. Según cuenta Público, el ya expolítico firmó, cuando residía en el Elías Ahuja, un artículo titulado “Lupus Ahujus” donde decía que tanto él como sus compañeros de residencia eran “una especie bastante evolucionada, con una masa craneoencefálica muy superior a la de otras manadas colindantes”. También se autodefinían como “machos ibéricos”.
En otro de los apartados, Casado indicaba que si los estudiantes cuando salen los fines de semana no conseguían acostarse con una chica, podían ir a por otras “más jóvenes”, a las que definía como “madriguera felina de mininos”. Y añade: “Entre sus presas más codiciadas se encuentran las lobas. Aunque si existe carestía de éstas, recurre de buen grado a otras especies animales como cerdas, zorras, gallinas...”.
En el texto también se hace uso constante del término ‘cacería’ y define a su especie como “una de las más promiscuas y lascivas de la península ibérica, que puede representar un auténtico peligro para la integridad de cualquier hembra del reino animal que se halle en periodo de madurez sexual”.