"¿Aprovechar la pandemia para desmantelar la sanidad pública? No creo...", por Marta Flich
¿Quién no querría que se agilizara la vacunación?
¿Quién podría poner en duda que en este momento cualquier esfuerzo para agilizar la vacunación es poco? ¿Quién podría negarse a la contratación de gente?
La realidad es que faltan más de 15.000 enfermeras en particular y personal sanitario en general. La subcontratación de servicios privados en detrimento de la sanidad pública terminan aumentando gastos, creando duplicidades y fomentando el desmantelamiento de lo público, a costa del bolsillo del contribuyente.
Eso sí, hay comunidades, como Asturias, que están haciendo un trabajo impecable, inyectando ya el 100% de las vacunas que tienen disponibles.