Aplausos a 'Cámbiame' por reunir a una madre y a su hija robada
Cristina Rodríguez, Pelayo y Natalia Ferviú acabaron llorando a lágrima viva.
Cámbiame, el programa de cambios de imagen de Telecinco, anunciaba la entrega de este martes como la más "especial y emocionante" y, para muchos, así ha sido. Curiosamente no ha recibido alabanzas por ningún estilismo, sino por la historia que había detrás de sus protagonistas: Mai y Toñi.
El 5 de septiembre Mai, de 36 años, acudió al programa con el objetivo de que su rostro se viera en muchas casas por si algún espectador la reconocía. Mai sospechaba que podía ser un bebé robado pero apenas tenía pistas sobre su origen: sabía que era adoptada y su posible apellido original, que el programa no dio a conocer.
Tras la emisión, la redacción recibió la llamada de Toñi. Una de sus hijas la había avisado del parecido de Mai con otra de sus hermanas. No era el único detalle que encajaba: Toñi había dado a luz el mismo día y en la misma ciudad pero le habían dicho que su bebé había fallecido. Su apellido, Arias, también coincidía.
Tras llevar a cabo unas pruebas de ADN que confirmaban que Toñi y Mai son hijas con una probabilidad superior al 99,99%, el programa fue esta tarde el escenario de su encuentro.
Antes de poder abrazar a su hija Toñi contó a la presentadora Carlota Corredera que muchos en su entorno pensaban que estaba loca por insistir en buscar a su bebé. "Cada 25 de agosto metía un regalo para mi niña en una cajita", aseguró.
Mientras el programa preparaba un look más colorido para Toñi, que iba de negro, Mai entró en el plató y pudo tener el primer contacto con su familia biológica al conocer a una tía y a un hermano.
Minutos después llegó el ansiado desenlace. Toñi y Mai se vieron por primera vez y pudieron fundirse en un gran abrazo. "¡Ya me has encontrado!", exclamó la hija, mientras que su madre le preguntaba si estaba bien y le decía: "¡Qué guapa eres!". Puedes ver el momento aquí.
"Ahora vamos a aprovechar, de aquí en adelante", prosiguió Mai. "Tú te vienes conmigo para Huelva, tú y tus niños", propuso la madre. "Puedo irme unos díitas, lo voy a arreglar para que ellos vengan también", prometió la hija. El reencuentro hizo que a todos los estilista del programa —Cristina Rodríguez, Pelayo y Natalia Ferviú— se les soltara la lágrima.
Mai aclaró que la culpa de su caso era de la clínica en la que nació y, como colofón, sorprendió a su madre al decirle que fuera de los focos iba a poder conocer a sus nietos.
Si cualquier día de emisión de Cámbiame la red social Twitter se llena de mordaces comentarios sobre los estilismos, este martes la mayoría han sido de alabanza.