Antonio Castelo: "La comedia está en guerra total"
El cómico presenta en Comedy Central la nueva temporada de 'CCN' junto a Marta Flich.
La revista satírica Mongolia tiene que pagarle al torero Ortega Cano 40.000 euros por injurias, políticos del PP claman contra La Vida Moderna, en la SER, por hacer chistes sobre Huelva y hasta los feriantes se han cabreado con El Monaguillo por incluir en su monólogo una broma sobre ellos.
Son malos tiempos para hacer comedia en España o eso piensa el cómico Antonio Castelo, que estrena este domingo en Comedy Central la tercera temporada de CCN, el informativo irreverente que trata la actualidad agarrando al espectador de la solapa.
"La comedia está en guerra total: la gente se ofende por todo, hay mil sensibilidades absurdas, te pueden poner una querella, no se produce comedia en España y los cómicos tenemos que buscarnos la vida, los bolos se han venido abajo con la crisis, ya no se hacen directos... Estamos en un momento de cuidadito", explica Castelo a El HuffPost.
Castelo no vuelve solo, lo hace acompañado de la economista y actriz Marta Flich y de los cómicos Eduardo Galán y Manuel Burque. Todos forman un bloque heterogéneo en el que cada uno tiene su sitio: del humor brusco de Galán, al humor económico y erudito de Flich.
"Es un humor que me permite explorar lo que me dé la gana, mezclándolo con la economía, que es lo mío. Es un programa que está muy pegado a mi personalidad", cuenta Flich a El HuffPost.
Hacer humor subversivo se ha convertido en algo imposible en las cadenas generalistas españolas y muchos cómicos se han refugiado en los canales de pago y en la radio, espacios en los que se apuesta por un contenido más de nicho y que no tiene porque ir dirigido a toda la familia.
"En Antena 3 no hay ningún programa de comedia, hace años había alguna serie hecha por algún cómico con sketches así un poco locos y ya no hay nada. Ahora todo está cambiando muy rápido", afirma Castelo.
Pero Marta Flich tiene un poco más de esperanza: "De pronto puedes encontrar que en Telecinco son muy políticamente correctos, pero a raíz de toda la polémica que hay alrededor de los límites del humor hay muchas más autocensura que censura explícita".
Pero en CCN nada de esto.
Los límites del humor
Twitter se ha convertido en un lugar en el que un chiste de 2013 puede llevarte a la Audiencia Nacional. Siempre que esto ocurre, los medios acudimos a los cómicos para que expliquen por qué no está bien meter a la cárcel a alguien por hacer un chiste.
"Es absurdo que nos pronunciemos nosotros sobre esto, debe ser la gente la que lo haga. Uso un punto de vista para hacer reír, no es mi opinión. Es una ficción que se crea para que nos riamos de un sujeto que puede ser el mundo del islam o la gente que limpia las calles. Y yo mismo puedo tener un familiar que limpie calles", sentencia Castelo.
Marta Flich va más allá: "Me toca las narices, el coño y la polla tener que dar explicaciones. Somos personas que nos dedicamos a ir a la contra y hacemos todo de forma contextualizada. El humor es para los valientes".
Pero matiza que el humor va en función del estilo de cada cómico: "Yo nunca haría humor de alguien que ha muerto hoy, ahora bien, ¿se puede hacer hoy en día un chiste de Rita Barberá? Yo creo que sí, pero yo no lo haría porque no es mi estilo. No me siento cómoda y, si hay algo que no me divierte, yo no lo hago".
"El chiste no va dirigido a nadie en concreto, tendríamos que hablar de los límites de la ofensa personal. ¿El amor tiene límites? ¿Cuáles son los límites de la piel fina?", se pregunta Castelo.
La receta de Castelo para frenar el exceso de piel fina es clara: "Cuanto más hablemos de querellas más le llega a la gente que lo puede hacer y más lo hacen, si se deja de hablar se dejará de hacer".
Pero el cómico también pone el foco en los medios de comunicación y asegura que el debate "se llama Twitter" y en los periodistas "a los que les flipa Twitter": "Al gremio de panaderos no le flipa Twitter y no están todo el día hablando de eso".
"Colectivos de indignados hay en todas partes y muchos ya vienen indignados de casa. En la sociedad existe en una forma de entender el humor que se ha convertido en literal y la base del humor es la metáfora, el saber pensar, yo hablo de temas de todo tipo y seguro que siempre habrá alguien que se indigne", cuenta Flich.
Marta Flich, parafraseando un monólogo de David Broncano en Locomundo (#0), también lo tiene claro: "A quien le joda el chiste que se joda o que se vaya al bar y se tome una copa".
"A mí me han tirado perros al escenario, me han pegado, eso sí son límites pero esto me parece una chorrada. Aunque bueno, yo me he hecho un seguro para protegerme de estas demandas, que yo sí me la juego bastante con las cosas que digo", sentencia Castelo.