'Antidisturbios', la serie que los sindicatos de policía no quieren que veas
La producción dirigida por Rodrigo Sorogoyen se estrenó el viernes 16 de octubre en Movistar+.
Si hay una serie de la que se habla estos días, ésa es Antidisturbios. La producción del director Rodrigo Sorogoyen (El Reino, Madre) llegó el viernes 16 de octubre a Movistar+ haciendo un ruido ensordecedor. A nadie parece haberle dejado indiferente. Porque a los halagos —muchos— se han unidos las críticas —también bastantes— e incluso se ha hablado de llamamientos a boicots. Los sindicatos policiales lideran ese intento de hacer fracasar la serie protagonizada por Raúl Arévalo, Roberto Álamo, Patrick Criado y Vicky Luengo, entre otros.
De qué va Antidisturbios
Decía Rodrigo Sorogoyen en una entrevista con Público previa al estreno, que la voluntad de Antidisturbios “es meter al espectador in situ” en una Unidad de Intervención Policial: “Ni embellecer ni demonizar, pero sí que el espectador viva de manera literal o de la manera más hiperrealista posible lo que vive esta gente, para que luego ya juzgue”.
El punto de arranque de esta miniserie de seis episodios, cada uno de 50 minutos, es un desahucio en el centro de Madrid. El desalojo se complica y sucede una tragedia, que obliga a un equipo de Asuntos Internos de la Policía a investigar los hechos. La agente de Asuntos Internos Laia (Vicky Luengo), la encargada de investigar los hechos, se obsesiona con el tema y acaba sacando a la luz asuntos que no imaginaba.
Por qué se está criticando
Las críticas a Antidistubios vienen de los propios antidisturbios. Son ellos quienes han puesto el grito en el cielo, liderados por SUP (Sindicato mayoritario en afiliación del Cuerpo Nacional de Policía. Liderazgo, Compromiso y Cambio) y JUPOL (Sindicato líder de la Policía).
Critican que los agentes se presentan como drogadictos y agresivos y que la serie daña la imagen de esta unidad. Hablan incluso de “basura”.
Desde SUP se quejan también de aparecer en los títulos de crédito, en el apartado de Agradecimientos, y piden a Movistar+ que elimine su nombre.
“La colaboración consistió en la cesión, de buena fe y sin conocer de antemano el contenido de la serie, de material que pudiera ser utilizado por el departamento de arte para recrear la decoración de unas hipotéticas instalaciones policiales. Ese gesto que tuvimos en su momento, hace ya tiempo, se produjo sin saber que la serie faltaría al respeto a los policías de las UIP porque en ningún momento se nos trasladó el sentido en el que se iba a novelar la vida de los protagonistas”, dice el comunicado distribuido a través de Twitter.
Este sindicato apunta que no entiende “quién y en qué términos habría podido aconsejar al director y a su equipo sobre la realidad el trabajo de las UIP”.
Lo que dicen desde la serie los antidisturbios
Hay en los títulos de crédito de Antidisturbios otro agradecimiento: a la Dirección General de Policía (DGP). Según recoge el diario ABC, el sindicato responsabiliza de “las falsedades vertidas a la Dirección General de la Policía” y exige explicaciones para “determinar qué responsabilidades ha habido en la DGP y actuar en consecuencia, porque la imagen del Cuerpo ha quedado en cuestión”.
Lo que está claro, según contó Rodrigo Sorogoyen en una entrevista en La Voz de Galicia, es que los personajes de la serie nacen de conversaciones mantenidas con tres agentes de esta unidad: “Cuando quedábamos con antidisturbios para tomar un café, veíamos, o intuíamos, distintos perfiles psicológicos, y los apuntábamos. Lógicamente, nuestra intención, como la de cualquier guionista, era hacer un grupo muy heterogéneo, con perfiles muy distintos, pero que fuesen ese furgón, esa familia que empieza unida, y que termina un poco separándose”.
Lo contó días antes del estreno y no se ha vuelto a pronunciar. Tampoco la guionista Isabel Peña, que en una entrevista también previa en ABC aseguraba que en esas conversaciones descubrieron “cosas muy jugosas y otras tan obvias como que son personas normales y corrientes”. Ni siquiera han hablado (ni van a hablar) desde Movistar+, que prefieren no alimentar. “Respetamos mucho la libertad de expresión y la manera en que se expresan los sindicatos, pero es una obra de ficción donde pasan cosas inventadas que no son documentales y, lógicamente, para recrear las mecánicas del trabajo se ha contado con la colaboración de la DGP”.
Lo que celebran las críticas
Si Antidisturbios está siendo una serie celebrada por la crítica —ya lo fue en su presentación en el Festival de Cine de San Sebastián— no es por su argumento, sino por su calidad técnica e interpretativa.
El trabajo de los actores, y en especial de la casi desconocida Vicky Luengo, es uno de los puntos fuertes según la crítica. “Ella y Keuchkerian, el español de origen armenio que hace de Bogotá en La casa de papel, realizan las interpretaciones más destacadas”, escriben en La Vanguardia.
“Vicky Luengo hace un papelazo de esos que dejan la sensación de necesidad. Es decir, de la necesidad de querer ver a su Laia Urquijo durante muchos más episodios y cómo se desarrolla después del final de la temporada”, apuntan sobre la actriz en Los Lunes Seriéfilos, donde definen antidisturbios como “un thriller adrenalínico que transmuta a algo más interesante y poliédrico”.
En Hobbie Consolas celebran la forma de rodar: “Donde brilla con luz propia es en el plano formal, que nos lleva a disfrutar de (y sufrir con) numerosos planos secuencia larguísimos en los que se mantiene la tensión con mano de hierro y en la que vemos a los personajes en peligro, en escenas multitudinarias y nos metemos en su piel. No hay departamento en este sentido que no haya dado el 120%: es tan reseñable la música de Olivier Arson, como la dirección de arte de Miguel Ángel Rebollo, y ha debido suponer un verdadero reto mover la cámara entre los personajes y planificar el rodaje de teniendo una calidad excelente del sonido (obra de Aitor Berenguer) y una textura muy realista en la fotografía (de Alex de Pablo)”.
El origen y el objetivo de Antidisturbios
Antidisturbios llega en 2020 pero lleva casi una década en la cabeza del director. Empezó a fraguarse en los días con los movimientos del 15-M. Sorogoyen vio un vídeo de una intervención policial en la Costa del Sol que le llamó especialmente la atención. “Fue una carga muy bestia y a uno le daban ganas de pegarles a ellos. Pero luego los tíos aparecían llorando”, dijo en la presentación en San Sebastián.
Su objetivo fue desde el principio despertar la empatía del espectador. “Hablar de personas que te caerían fatal y empujar al espectador a que las entienda”, según palabras del director recogidas por La Vanguardia. “Quisimos saber de qué son capaces, cómo duermen y qué les dicen a sus hijos”, explicó Sorogoyen, que trabajó con una única obsesión: lograr el equilibrio.
Isabel Peña lo resume en pocas palabras: “No queríamos convertir a estos polis en los mejores padres del mundo, no había que pasarse. (....) Nos esforzamos por ser justos, y no nos tembló la mano a la hora de contar lo innecesariamente violentos o injustos que a veces son los antidisturbios”. El objetivo era precisamente mostrar la “tensión brutal” entre lo entendible y lo injustificable.
Quién más participa en Antidisturbios
Además de la celebrada interpretación de Vicky Luengo, la serie cuenta con otros conocidos actores que se meten en la piel de los seis agentes de la Unidad de Intervención Policial que protagonizan la serie:
- Raúl Arévalo
- Hovik Keuchkerian
- Álex García
- Roberto Álamo
- Raúl Prieto
- Patrick Criado