Ana Rosa Quintana: "Podré decir que estoy dada de alta en cinco años o así"
La presentadora ha vuelto a 'El Programa de Ana Rosa' 342 días después.
El regreso de Ana Rosa Quintana a Telecinco ha copado la actualidad de su programa, por mucho que haya contado con el líder del PP Alberto Núñez Feijóo poco antes de reunirse de urgencia con Pedro Sánchez. En el avance, además de hablar de su enfermedad, ha arremetido contra las últimas medidas del Gobierno.
Ya avanzado el programa, se ha sentado con Joaquín Prat para hablar con más sosiego de su enfermedad. Una de las preguntas de Prat ha sido si estaba dada de alta tras estos 342 días fuera de antena, ante la que Quintana se ha mostrado cautelosa. “Podré decir que estoy dada de alta en cinco años o así. Una vez que acabas con la quimio, la radio y las intervenciones te quedan pastillas una para un año otra para cinco años, revisiones cada trimestre con escáner y demás. No hay que echar las campanas al vuelo. Me encuentro muy bien, pero me he encontrado muy bien todo el tiempo”, ha señalado.
Para ella, regresar a las pantallas “es una vuelta a la vida, bendita rutina”. La comunicadora ha señalado que en esta época toda su familia vuelve al trabajo y los estudios.
“Esta enfermedad no es solo un tratamiento es dura, incluso llevándolo bien. Te retira de tu vida, de la cotidianiedad, te bajan las defensas. Estas todo el rato pensando ’tengo que estar muy bien para no perder ninguna sesión”, ha señalado.
La presentadora ha recalcado que ha estado haciendo mucho deporte durante todo el periodo fuera y que caminaba una media de 8 o 9 kilómetros al día. “Es mucho mejor la actividad, que estar sentada en un sofá que da la cabeza a los pensamientos”, ha señalado, aunque ha admitido que lo ha hecho con “la obsesión de no perder ninguna sesión de quimio y acabar cuanto antes”.
Quintana se ha mostrado muy agradecida a su equipo médico y a su familia y amigos. De su marido ha dicho que ha ido a todas las sesiones de quimio y radio, excepto una. “Y ese día vinieron mis amigas y mi hijo”, ha contado. Sin embargo, es consciente de que su situación no es la de todo el mundo.
“Hay gente que va sola a darse la quimio y va en metro y luego va a casa y tienen niños pequeños y van a atenderlos. Tienen parejas en muchas ocasiones que incluso rompen, porque es una enfermedad que arrastra a las familias”, ha indicado.
La conductora de El Programa de Ana Rosa también ha tenido palabras para sus amigas de las que ha dicho que cada día la acompaña una. “Pienso que tienen que tener un Excel porque no hay día que no esté ninguna. Digo, se tienen que poner de acuerdo”, ha indicado. “He sentido muchas cosas, pero soledad no”, ha zanjado.
Sobre su nuevo ritmo de trabajo, Quintana ha asegurado que no puede tener el que tenía antes y que sus médicos le han pedido que se cuide como compromiso. “Los humanos somos muy idiotas, todos creemos que hemos aprendido muchísimo, pero sé que mi vida tiene que cambiar”, ha indicado.
“Me he sentido tan querida, por las calles, por todas partes. No tengo vida para agradecerlo”, ha enfatizado de nuevo ante de emocionarse con los mensajes de los espectadores. “No quería llorar, es que es muy fuerte”, ha acabado diciendo antes de recordar que lo que más rabia le ha dado perderse ha sido el funeral de Isabel II: “Yo que he retransmitido todo lo que ha pasado con Lady Di”. La presentadora ha asegurado sentir “una mezcla de nostalgia, de miedo, de nervios, de emoción”. “Es que desde que he entrado a las 7 de la mañana ya estaban todos mis compañeros esperando... Y siento gratitud, de verdad”, ha señalado.
La presentadora se ha mostrado incrédula por todo el cariño que ha recibido y ha asegurado darse cuenta de todo ello cuando se ha encendido el piloto de la cámara esta mañana. “Si yo no he hecho nada más que hacer mi trabajo, pero la respuesta ha sido tan brutal que dices, ’qué afortunada soy”, ha detallado.