Ana Julia dice ahora que no se reconoce en los audios con duros insultos a Gabriel
Según revela Antena 3. "A ver qué hago ahora con éste", se le escuchó decir.
Ana Julia Quezada, asesina confesa del pequeño Gabriel, ha negado ser la autora de los insultos grabados por la Guardia Civil en su vehículo, en las que se escuchan a la mujer mascullar duras palabras hacia el niño, y tras sacar de un agujero "el cuerpo desnudo de una persona" —según revela Antena 3—.
"A ver qué hago ahora con este", afirmó la asesina confesa del niño, tras seguir una trayectoria "errática" durante 75 minutos, ya con el cuerpo del pequeño en el maletero, y dar varios rodeos sin un rumbo fijo.
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Según ha explicado el periodista de El Periódico Luis Rendueles en el programa Espejo Público, Ana Julia se desvió, pasó por Almería, y terminó llegando a Vícar donde fue detenida.
"Como la Guardia Civil la había sondeado y le había tirado el cebo de pedirle las llaves de la finca, ella improvisa. Los guardias la van siguiendo y grabándola y en las imágenes se ven, los guardias ven en directo cómo saca el "cuerpecillo de una persona". Deciden seguirla a ver si todavía puede tener un cómplice por si hay otra persona implicada. Cuando se siente acorralada, improvisa. Lo único que tiene claro es que quiere sacar de esa finca a Gabriel", ha explicado Rendueles.
DECLARACIONES DE LA ABUELA Y LOS PADRES
Este viernes, el magistrado instructor ha citado en calidad de testigo a la abuela paterna del menor, de 84 años. Sus declaraciones llegan un día después de que Patricia Ramírez y Ángel Cruz, padres de Gabriel, compareciesen durante dos horas ante el juez instructor, Rafael Soriano, en calidad de testigos.
Ambos accedieron a la Ciudad de la Justicia en coche y por el garaje, y abandonaron las dependencias judiciales de la misma forma poco antes de las 15.00 horas. Han estado acompañados en todo momento por los abogados con los que se han personado en la causa como acusación particular, los hermanos Francisco y Miguel Ángel Torres, y antes de comparecer ante el magistrado han remitido un comunicado a los medios de comunicación en que aseguraban que se enfrentaban "sin duda" a "uno de los días más duros".
El juez Rafael Soriano les ha tomado declaración como testigos por separado para indagar en aspectos que permitan aclarar cuál era la relación del pequeño con Quezada y conocer detalles de su comportamiento hacía ellos durante los 13 días en los que se mantuvo su búsqueda desde que se perdiera su rastro el 27 de febrero en Las Hortichuelas, Níjar (Almería) y durante los que "dio una falsa apariencia de preocupación por la desaparición y suerte del niño" y "mantuvo el engaño, aumentándolo hasta el punto de colocar ella misma una camiseta del menor en el monte", tal y como él mismo subraya en el auto en el que decretó para ella prisión provisional, comunicada y sin fianza.
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