Alfredo Corell pone los puntos sobre las íes tras el aluvión de comentarios de los últimos días
“No es un engaño de la multinacional".
El popular inmunólogo Alfredo Corell ha desmentido de forma tajante un bulo que corre con rapidez en los últimos días y, según el cual, Pfizer habría admitido que no sabían si su vacuna era efectiva contra la covid cuando la vendieron.
El experto ha pedido responsabilidad a los medios de comunicación que están difundiendo esa información porque están “dando alas a los movimientos anti vacunas” y ha garantizado que “lo que se hablado en la Comisión Europea sobre Pfizer esta semana es algo sabido desde el minuto inicial”.
“No es un engaño de la multinacional. No se han sacado vacunas al mercado sin experimentar y probarse”, ha asegurado.
En un vídeo subido a su cuenta de Instagram, el inmunólogo explica que “las vacunas de ARN, Pfizer y Moderna, las vacunas de adenovirus, AstraZeneca y Jansen, que son las que están circulando en nuestro país, ninguna se experimentó para saber si frenaban la transmisión”.
Corell ha recordado que “se experimentó su seguridad y eficacia y todas pasaron el examen y por eso se aprobaron y han servido para lo que se quería que sirvieran: para que la gente no enfermara grave y para que la gente no muriera”.
“Pararon el número de muertes. Ha habido infecciones, sí, pero muy leves. Así que en este sentido no es nada nuevo lo que se habló el otro día en la Comisión Europea, lo sabemos desde el minuto cero”, ha repetido.
Y ha ido más allá: “Prácticamente ninguna vacuna de las que tenemos hoy en el calendario vacunal son de estas llamadas esterilizantes, que son un poco utópicas. De hecho, se pensaba que la del sarampión era esterilizante y probablemente tampoco lo sea del todo porque las técnicas de diagnósticos de hoy en día nos permiten identificar el sarampión asintamático”.
“Así que lo dicho: podemos criticar cómo se han vendido, cómo se han publicitado, cómo han gestionado los políticos la compra y distribución de estas vacunas, todo lo que queramos. Pero en cuanto a su uso terapéutico no podemos criticar nada”, ha zanjado Corell.