La vida de Alexia Rivas tras el 'Merlos Place': acoso por redes, comentarios machistas y ansiedad
La concursante de 'Supervivientes 2021' rompe su silencio más de un año después.
El Merlos Place se convirtió durante el confinamiento de 2020 en un tema de conversación en bucle, una historia con la que la gente se divertía. Sin embargo, a una de sus protagonistas (al menos) no le hizo tanta gracia aquella famosa pillada en la que una chica paseaba por casa en bikini mientras Alfonso Merlos conectaba en directo con el programa Estado de alarma. El periodista, en teoría, era novio de la colaboradora Marta López. La chica del bikini, Alexia Rivas, ha revelado más de un año después cómo le pasó factura ser la comidilla de todo el mundo.
La concursante de Supervivientes 2021 ha roto su silencio en una entrevista con la revista Lecturas, en la que ha confesado que estar con Merlos mermó su autoestima y que necesitó ayuda psicológica. Su mayor impotencia es que la culparan a ella de todo.
“Lo pasé muy mal e incluso dejé mi trabajo. Cargaban contra mí, cuando yo pensaba que esta persona [Merlos] estaba soltera. Todas esas críticas machistas eran duras. Salí la peor parada de los tres”, explica la exreportera de Socialité.
Con la polémica que dio la vuelta al mundo —le escribía “gente hasta de Croacia”—, llegaron los ataques de ansiedad. Rivas revela que “tenía que ir al hospital por las noches, cuando no había cámaras” porque se le disparaban las pulsaciones hasta alcanzar las 110. Ella en un coche y Merlos en otro, para que no les fotografiaran juntos.
Y la cosa no quedó ahí, según Alexia Rivas. El “acoso” no sólo fue mediático, también empezó a llegar por las redes, hasta el punto de recibir mensajes como “ojalá os muráis de un cáncer” o “menuda buscona”. Mensajes que también les llegaban a su familia y a sus amigas, a las que les decían “sois igual de hijos de puta y de zorras que tu amiga”, declara.
Alexia Rivas y Alfonso Merlos mantuvieron una relación de seis meses que no acabó bien. Ya no tienen contacto, aunque a ella no le parece justo “el precio profesional que pagó él” por el Merlos Place. Y dice alto y claro: “No pasé por detrás aposta”.