Madrid paga a curas y hace malabares para justificar que no contrata rastreadores
Casi 15.000 euros por los servicios de cada capellán a tiempo completo, recoge el Boletín Oficial de la Comunidad.
Rastreadores no demasiados, pero capellanes que no falten. La Comunidad de Madrid ha publicado en su Boletín Oficial el convenio con la Provincia Eclesiástica de Madrid para la asistencia religiosa católica en los centros hospitalarios.
El texto recoge la indicación para asignar un religioso por cada 100 camas (una cantidad creciente en función del número de pacientes) mientras se hacen malabares para justificar el escaso número de rastreadores en toda la región.
Según el BOCM, “los servicios que presten capellanes y personas idóneas por cada capellán a tiempo completo será de 14.967,29 euros a tiempo completo y de 7.574,81 a tiempo parcial”. Así, el montante previsto para los 53 a tiempo completo y 20 en horario limitado ascienden a 793.266,37 y 143.921,39, respectivamente, que serán sufragados por las gerencias de los centros.
La noticia se ha conocido el mismo día en que el vicepresidente, Ignacio Aguado, ha señalado que el número de rastreadores de casos de covid-19 no es un problema a día de hoy en la región y ha garantizado que si fuera necesario se incrementaría el número de estos profesionales.
En la Comunidad de Madrid hay 182 personas que están dedicadas a realizar labores de “rastreo” de los casos de coronavirus. “Hay dos tipos: 142 son técnicos de Salud Pública y 40 están dentro del Centro de Atención al Paciente (CAP)”, ha explicado en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.
BOCM-20200722-21 by El HuffPost on Scribd
“El problema no es que la Comunidad de Madrid no tenga ‘rastreadores’, es que adaptamos el equipo de ‘rastreadores’ a las necesidades que vamos encontrándonos en el día a día”, ha señalado Aguado. Si fuera necesario aumentar el número de ‘rastreadores’ por un incremento de casos de coronavirus, se reforzará el número de profesionales en proporción, ha añadido.
Aguado ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad a los madrileños, al afirmar que los rebrotes en la región a día de hoy están “controlados”, tanto los casos positivos como los contactos, los familiares y el entorno cercano de estos casos.
“Seguimos en alerta, porque en cualquier momento puede haber un nuevo rebrote o se puede puede descontrolar alguno de los anteriores”, pero, a día de hoy, “no es un problema” el número de ‘rastreadores’, porque si hiciera falta aumentarlo en función de la segunda ola de nuevos rebrotes, se haría para garantizar la atención y la monitorización de todas las personas que lo necesitan y su entorno, ha insistido.
En la actualidad la región cuenta con varios brotes, controlados por el momento y sin apenas afectación de ingresos en hospitales, aunque sus datos de contsgios siguen siendo notables, según los balances diarios de Sanidad.
Madrid sigue sin decretar el uso obligatorio de mascarillas aunque se mantenga la distancia de seguridad, pero sí se muestra a favor de su uso, “incluso en espacios privados”, como ha defendido el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, tras una reunión con el ministro del ramo, Salvador Illa.