Adriana Ugarte: "Si viéramos que ya lo tenemos todo, dejaríamos de ansiar conquistar más"
La actriz coprotagoniza 'Heridas', la nueva serie de Antena 3: “Necesitamos estar arrebatando y friccionando con los otros. Si lo haces a nivel global, explotan y estallan guerras”.
Málaga-. Que Heridas es, precisamente, una historia sobre tres mujeres heridas, se podría intuir. Una niña y el abandono infantil y dos adultas, su madre y otra mujer que genera un vínculo emocional con la menor. En palabras de María León, una de sus protagonistas, “aquí lo nuevo es que sean tres mujeres las protagonistas. Eso ya es algo más raro, el poder chochal”; tres mujeres que “son víctimas”: “Las superheroínas también son víctimas, y ellas son superheroínas a su manera”.
No dista tanto de lo que dice otra de sus cabezas de elenco, Adriana Ugarte. “No son heroínas. Son los personajes de dos mujeres que quieren con toda su alma a una niña”, matiza.
Manuela es una joven que vive sola, a pocos kilómetros de Alba, una niña de siete años que nunca tiene quien le haga el desayuno. Su madre, Yolanda, trabaja de noche como pole dancer y duerme de día. El novio de ella, Lucho, no está por la labor de cuidar a una niña que no es suya. El día en el que Manuela encuentra a la pequeña Alba, comenzarán un viaje que obligará a Manuela a enfrentarse a los demonios de su pasado y a cuestionarse los pilares de su vida.
Esa es la premisa de Heridas, la ficción para el prime time de Antena 3 que se ha presentado este domingo en el Festival de Málaga, y que está basada en la serie japonesa Mother y su remake turco.
Además de analizar las ‘heridas’ de los personajes, de las madres, de esos vínculos... Ugarte se atreve a ir más allá. “La ambición y el egoísmo es la herida del mundo desde el punto de vista sociopolítico, humana e individualmente. El problema es que tenemos un sentimiento tan fuerte de insuficiencia que necesitamos estar constantemente arrebatando y friccionando con los otros. Tanto a nivel individual como si lo haces a nivel global, explotan y estallan guerras”, sentencia.
Aquí eres una dependiente emocional…
La serie da una vuelta más de tuerca a los terrenos ambiguos no tan amables del ser humano. Manuela es un personaje que podríamos haber trabajado desde la luz, desde un sentido inmaculado, al que le mueve la empatía; o desde un lugar más sombrío, políticamente incorrecto. Me apetecía trabajar con ella algo que tenía que ver con la dependencia emocional con la niña. Se generan unos lazos que a ratos pueden mostrar una parte de Manuela enfermiza, no como esa imagen de la salvadora, sino un ser humano que arrebata una niña a otro ser humano.
¿Eso es valiente, interpretativamente hablando?
Sí, porque al final tenía la intención de no caer bien y no ser complaciente y he podido hacerlo. No quería hacer como la buena samaritana, no me apetecía, quería hacer una mujer con sus traumas, con sus carencias.
Generar odio, empatía, cariño (o no generar nada)… ¿es lo que te convierte en una buena o mala actriz?
No sé, pero si genero cosas en el espectador estoy feliz. Cada vez me gusta más porque cada vez me siento más querida por mi trabajo y siento que esto tiene sentido, para que lo vean los demás. Es como una especie de creación para otro, es una ofrenda. Es muy ambicioso pretender que el espectador sienta cosas. Por eso, cuando me dicen ‘qué esperas de tu público’, yo con que lo vea y sienta algún tipo de cosa, ya es mucho. Esto es para vosotros y lo que el otro haga con ello es su decisión y su libertad. Me genera mucho respeto y mucho compromiso.
¿Por qué crees que tu personaje genera tantas emociones encontradas?
El público puede empatizar y creo que, por momentos, va a sentir distancia y va a salir juicio y crítica. Es interesante, porque cuando sale es porque hay alguna herida. Es una serie que no va a dejar indiferente a nadie.
¿Te has quedado con algo de Mother para esta adaptación?
Casi nunca veo la base sobre la que ha sido adaptada la obra. Me cuesta menos trabajarlo si todo es tan nuevo, porque prefiero vivirlo de primeras y llenarlo con otras referencias y otras aspiraciones.
¿Eso quiere decir que te influiría de manera negativa ver la anterior?
No me aportaría nada negativo verlo, prefiero conseguir el personaje en base a otras inspiraciones, libros y pelis. Lo único es que, a lo mejor, sin querer, algo que has visto se queda en el inconsciente y prefiero que si hay alguna coincidencia sea mera casualidad. Prefiero una elaboración nueva, no me da miedo explorar ni sumergirme.
¿Cuál es la ‘Herida’ del mundo en el que vivimos?
La ambición y el egoísmo, es la herida del mundo desde el punto de vista sociopolítico, humana e individualmente. Si fuéramos capaces de ver que ya lo tenemos todo, dejaríamos de ansiar tener más y conquistar más y poseer más. El problema es que tenemos un sentimiento tan fuerte de insuficiencia que necesitamos estar constantemente arrebatando y friccionando con los otros. Tanto a nivel individual como si lo haces a nivel global, explotan y estallan guerras.
Cuando se trabaja en un rodaje tan intenso, ¿qué es lo mejor de que termine?
Llegar a casa con mi perro. Han sido muchas jornadas. Lo que me parece tan real de esta serie es que, cuando se apaga el fuego, el protagonista sigue caminando y surgen más fuegos. Vas mutilando al personaje. No son heroínas. Son los personajes de dos mujeres que quieren con toda su alma a una niña.