6 claves para entender la victoria del ultraderechista Bolsonaro en Brasil
Candidato del PSL saca 57,7 millones de votos y asumirá la presidencia el 1 de enero de 2019.
Jair Bolsonaro ha dejado al mundo atónito tras lograr este domingo conseguir la presidencia de Brasil. ¿Cómo puede el país líder de América del Sur, dueño de la octava mayor economía del mundo, dar ese giro tan estrepitoso a la derecha?
Con 57,7 millones de votos, el candidato del PSL llega al poder con mayor legitimidad que su antecesora elegida en 2014. Ha tenido el 55,13% de los votos válidos contra el 44,87% de Fernando Haddad (Partido de los Trabajadores), elegido por 47 millones de electores. En 2014, Dilma Rousseff tuvo 54,5 millones de votos y Aécio Neves (PSDB), 51 millones , 51,64% contra 48,36%.
El escenario que posibilitó la elección de Bolsonaro, militar del Ejército con retórica autoritaria, se viene dibujando desde hace, al menos, 5 años. En 2013, la revuelta "contra todo lo que está ahí" se materializó en las Jornadas de junio, una serie de protestas iniciadas por el aumento de 20 centavos en los billetes del transporte público de São Paulo.
Pero no era sólo por los 20 centavos, como decían los manifestantes de entonces. Estos son los 6 factores que han llevado a la victoria a Bolsonaro:
1- Anti-PT
El Partido de los Trabajadores ha permanecido 14 años en el poder. Y habría permanecido más si Dilma Rousseff no hubiera sido destituida como presidenta del país en un juicio político llevado a cabo por el Congreso en 2016.
En esa década y media en el poder, el PT estuvo involucrado en 2 graves escándalos de corrupción: el mensalão, descubierto en 2005, en el primer mandato del expresidente Lula da Silva, y los sobornos descubiertos en Petrobras tras la Operación Lava Jato en 2014.
La retórica lulista del "yo no sabía", tanto los escándalos de corrupción fue alimentando la rabia hacia el PT, que, en otro tiempo, se vendía como baluarte de la ética y ya entonces empezó a caer en la fosa común de las leyendas marcadas por la corrupción.
Jair Bolsonaro se ha posicionado como enemigo claro del PT, sobre todo, en los cuatro últimos años. Incluso habiendo votado de forma semejante al partido en la Cámara en diversas ocasiones, el militar prácticamente se autoproclamó "ametralladora de petralhas" (petralhas es una expresión que utilizan algunos conservadores para referirse a los simpatizantes del PT).
2- Rechazo a la política tradicional
"La clase política brasileña está arrasada por los escándalos de corrupción que han asolado al país. Destrucción de los líderes políticos, crisis de credibilidad del Congreso Nacional, de los partidos y de los líderes", analiza Lucas de Aragón, socio y directo de Arko Advice, empresa de análisis político, en una entrevista con El HuffPost Brasil.
"Es entonces cuando aparece un outsider, que así se vende a sí mismo, y la sociedad lo acepta", explica Aragón. Se refiere a Bolsonaro, que, a pesar de llevar 27 años en la Cámara Federal, no ha sido considerado por el electorado como un miembro del clan de la "vieja política".
Pero ese sujeto exótico fue ganando cada vez más focos, aún más después de defender el impeachment de Dilma en la Cámara con homenajes a un torturador.
3- Voluntad de cambio
El agotamiento con la política tradicional ha llevado a los brasileños a anhelar cambios. Es la búsqueda de lo nuevo, de lo desconocido. No es una coincidencia que en la primera vuelta, el Senado brasileño tuviera un 85% de renovación. De las 54 plazas en disputa, 46 fueron ocupadas por nombres nuevos.
Los nombres tradicionales como Romero Jucá (MDB-RR) y Eduardo Suplicy (PT-SP) quedaron fuera. A la derecha o la izquierda, las caras de la vieja política fueron rechazadas.
Esta voluntad de cambiar fue decisiva para formar el tsunami pro-Bolsonaro que eligió la segunda mayor bancada de la Cámara Federal. Su partido, PSL ( Partido Social Liberal) también logró, además del presidente, 3 gobernadores estatales.
4- Crisis económica
Los errores en la política económica de Dilma produjeron una inflación galopante, unos intereses altos y el más duro reflejo de la recesión: el desempleo. A pesar de que Temer ha cambiado el rumbo que impuso el PT, el brasileño medio continúa quejándose de su bolsillo.
Para Lucas de Aragón, de Arko Advice, Bolsonaro logró abordar el problema de la economía al enfatizar en la campaña su agenda liberal. "El elector brasileño es maduro y muy pragmático, capaz de elegir a un doctor de la Sorbona, como era Fernando Henrique Cardoso y, 4 años después, a un líder sindical que no tenía una escolarización formal, porque entiende que esa es la persona adecuada para proveer lo mejor para el país en aquel momento ", explica Aragón.
5- Criminalidad
Brasil tiene cerca de 60.000 homicidios al año. Según el ranking del Centro de Liderazgo Público, 19 de los 27 estados del país han caído en los indicadores de seguridad pública. El miedo y la inseguridad forman parte de la rutina de los brasileños.
"Bolsonaro dice que no va a dar margen para la criminalidad, que va a disminuir la edad penal de 18 a 16 años y que va a armar áreas rurales para defender la propiedad", enumera Aragón sobre los puntos de la narrativa de Bolsonaro contra la criminalidad.
El deseo de una solución simple a un problema complejo alimenta la esperanza en el rigor y la disciplina de un exmilitar, que quiere mano dura para los criminales y no "derechos humanos".
6- WhatsApp
El Bolsonaro de hoy es ciertamente una creación de las redes sociales. Su red de apoyo construida en WhatsApp es una de las más aguerridas. La profesora de la UFSC (Universidad Federal de Santa Catarina) Leticia Cesarino asegura que el presidente electo ha inaugurado en Brasil el "populismo digital".
"Su campaña no tiene precedentes en el uso populista de las plataformas digitales, en especial, WhatsApp", explicó a El HuffPost Brasil. "Los votantes tomaron el lugar del Bolsonaro en la campaña digital, principalmente después del atentado que el candidato sufrió".
El apuñalamiento el 6 de octubre ciertamente cambió el curso de su campaña, llevándolo lejos de los debates en la televisión y cerca de los votantes en las vidas y secuencias de tweets constantes.
En todas las redes, las fake news han sido diseminadas por la militancia pro-Bolsonaro. El diario Folha deSao Paulo también ha denunciado que varias empresas han pagado por paquetes de mensajes contra el PT vía WhatsApp.