Hemos visitado uno de los súper más raros de España y hemos encontrado estos 18 extraños productos
El extraño establecimiento aterrizó en Alcorcón el pasado 29 de noviembre.
Cuando uno lee que el supermercado friki ha abierto sus puertas en Madrid, bautizado como el “templo del frikismo”, se imagina un enorme local que recree el interior de la Estrella de la Muerte de Star Wars o, al menos, que la entrada esté franqueada por las estatuas de los Argonath de El Señor de los Anillos. Se imagina pasillos y pasillos llenos de merchandising de personajes como Chewbacca, Harry Potter o Jon Nieve.
Nada más lejos de la realidad. Super Friki Market ha llegado desde Barcelona, está instalado en el centro comercial de X-Madrid de Alcorcón (Madrid), su tamaño se asemeja más bien a una tienda de chinos y solo se venden productos de alimentación. Eso sí, el cajero y único empleado va disfrazado del inolvidable personaje de videojuegos Mario Bros.
Las paredes del local son de color verde pastel y están decoradas con pegatinas con emoticonos y dibujos japoneses. “La ambientación es un rollo muy anime, muy kawai”, según explicó Rubén Sánchez, fundador de la empresa Reino de Juguetes, en una entrevista en Madrid Directo.
El hilo musical también resulta sorprendente para los clientes: de fondo no se escucha la mítica Marcha Imperial, que sonaba cuando llegaba Darth Vader, sino Lo hacemos y ya vemos, canción de la banda sonora de La Llamada interpretada por Anna Castillo y Macarena García, o San Vitus Dance, de las Nancys Rubias y Fabio McNamara. Frikismo made in Spain.
Las estanterías del local se encuentran llenas de productos colocados sin ningún orden aparente. Los cereales de Mario Bros o de Oreo comparten estante con las patatas fritas o las cervezas de Juego de Tronos. Las caras de los Pokémon más famosos como Pikachu o Chamander aparecen por todos lados, ya sea en latas de refrescos, en fideos, en galletas o en chocolatinas.
Aquí puedes ver algunos de los productos:
La mayoría de productos se importan desde Japón o Estados Unidos. Y eso se nota en los precios. Hay latas de bebidas energéticas con los superhéroes de Marvel, de Sonic o de Dragonball Z, que se venden a 3,99 euros; patatas Lays con sabor a pollo mexicano, a 2,95 euros; y latas de Fanta de sabores como melocotón o manzana, a 1,99 euros. Las cajas de cereales ascienden hasta los 11 euros. Eso sí, todo el que entra en la tienda se lleva algo.
El establecimiento vende productos que parecen sacados de una película extranjera como el algodón de azúcar en bolsa o las patatas Pringles de sabores como pepinillos o queso cheedar (a 4,49 euros). Las neveras exponen refrescos que simulan ser la mítica cerveza de mantequilla del mundo mágico de Harry Potter.
Las chocolatinas tienen un papel protagonista en el supermercado friki. Las hay con dibujos para todos los gustos: Popeye, Micky Mouse, Sonic o el Rey en el Norte. El producto estrella es, sin duda, la tableta de chocolate de Willy Wonka, de Charlie y la fábrica de chocolate, la novela escrita por Roald Dahl que Tim Burton llevó a las salas de cine. ¿Y tú, ya tienes tu billete dorado?