15 playas nudistas para despelotarse a gusto en España
Ya ha llegado el calor y lo que apetece es llevar la menor ropa posible. Si te sobra hasta el bikini, quizá haya llegado el momento de pasarse directamente al nudismo. ¿Aún no lo has probado? Pues ya tardas. En cuanto superes el pudor inicial, empezarás a darte cuenta de que todo son ventajas: te da una sensación de ligereza y libertad únicas, te ayuda a aceptar tu cuerpo y a superar pequeños (o grandes) complejos, y, sobre todo, te permite soportar mejor el calor, porque sin ropa la temperatura percibida baja cinco grados aproximadamente. ¡Cinco grados! Ahí es nada. Adiós, ropa; hola, fresquete.
Para que te pongas las pilas, aquí te dejamos la selección definitiva de las mejores playas nudistas de España; algunas fueron pioneras en el maravilloso arte de olvidarse de la ropa, y otras se han ido sumando a la moda poco a poco. ¿Norte, sur, Mediterráneo o islas? Tú eliges, las hay por todas partes.
Maspalomas (Gran Canaria)
Un clásico entre los clásicos: las doradas dunas de Maspalomas dan paso a la que quizá sea la playa nudista más conocida de España. Únete a los viajeros de todo el mundo que se acercan cada año a la zona naturista de esta playa, entre el faro de Maspalomas y la playa del Inglés, al otro lado de la punta de Maspalomas.
Perfecta si buscas: agua cristalina y arena dorada, fácil acceso y todos los servicios que puedas imaginar.
El Playazo (Vera, Almería)
Es la meca del nudismo en España: además de su extensa playa de arena fina, con casi dos kilómetros acotados para la práctica del nudismo, encontrarás establecimientos naturistas (desde restaurantes hasta hoteles) para no tener que volver a vestirte en ningún momento.
Perfecta si buscas: una comunidad naturista en la que vivir feliz sin ropa, pero sin dejar de lado ninguna comodidad.
Torimbia (Llanes, Asturias)
Media luna de arena dorada rodeada de vegetación: esta es la playa ideal para sumergirte de lleno en la naturaleza. Lleva desde los años 60 acogiendo a naturistas que prefieren escapar de las grandes aglomeraciones.
Perfecta si buscas: belleza natural salvaje, sin edificios ni grandes masas turísticas.
Barinatxe (Getxo, Bizkaia)
Otra de las playas más bonitas de la costa cantábrica, conocida como “La Salvaje”. Tiene una zona de tradición naturista en su parte oeste y ofrece servicios como aparcamiento, limpieza o vigilancia.
Perfecta si buscas: una excusa para correr en bolas, pues la carrera nudista de Sopelana se celebra cada verano en esta playa.
Es Cavallet (Ibiza)
Y para salvaje y natural, Es Cavallet, en Ibiza. Inmersa en el precioso parque natural de Ses Salines, sus dunas de arena fina te darán el parapeto que necesitas para dejar atrás la vergüenza. Está dividida en tres partes, una de ellas dedicada al nudismo.
Perfecta si buscas: una playa de ambiente y la posibilidad de cruzarte con algún famoso en sus inmediaciones.
Figueiras (Cíes, Pontevedra)
Aunque no está reconocida oficialmente como nudista, es muy normal encontrarse con un ambiente completamente mixto desde hace más de una década. En este trocito de paraíso situado al norte de las islas Cíes encontrarás una playa de arena blanca y unas aguas turquesas libres de contaminación. No hay lugar mejor para desconectar de todo.
Perfecta si buscas: intimidad y tranquilidad (y no te importa que el agua esté algo fresquita).
El Saler (Valencia)
A poco más de diez kilómetros al sur de Valencia puedes sacar a relucir tus carnes hermosas en esta gran playa de arena, con una amplia zona destinada al nudismo. Tiene socorristas, es accesible en silla de ruedas y el agua está limpita, que no es poco.
Perfecta si buscas: una playa agradable donde hacer nudismo sin alejarte mucho de la ciudad.
La Mar Bella (Barcelona)
No hace falta salir de Barcelona para tumbarse a la bartola sin tapujos ni taparrabos: los 500 metros de arena fina de La Mar Bella, junto al barrio del Poblenou, reciben a turistas de todas las nacionalidades que aprovechan para disfrutar del nudismo en la ciudad condal.
Perfecta si buscas: la comodidad de llegar en metro a la playa.
Bolonia (Cádiz)
Probablemente ya conocerás este pequeño paraíso, cuyo único defecto (para el que no quiera practicar surf, kitesurf o similares) es el viento. Bien, pues también tiene rinconcito dedicado al nudismo (¡faltaría más!), en sus casi cuatro kilómetros de arena fina.
Perfecta si buscas: una puesta de sol como pocas.
Roques Planes (Calonge, Girona)
¿Quieres algo especial? Esta coqueta calita de la Costa Brava te va a encantar: solo se puede llegar a pie y tiene un pequeño tramo de arena rodeado de suaves rocas redondeadas.
Perfecta si buscas: practicar esnórquel con o sin bañador en sus aguas transparentes.
Cantarriján (Almuñécar, Granada)
Tomar el sol desnudo, bañarte desnudo, pasear desnudo e incluso sentarte en un restaurante a comer desnudo… ¿Qué más se puede pedir? Esta playita de arena y piedra bajo los acantilados de Maro presume de ser la mejor playa nudista de la Costa del Sol… ¡Y no seremos nosotros quienes digamos lo contrario!
Perfecta si buscas: nadar entre los pececitos que se observan a simple vista en sus aguas cristalinas.
Nueva Umbría (Lepe, Huelva)
Quedarse en cueros en esta inmensa de playa es un auténtico privilegio: sus más de diez kilómetros de arena dorada y las refrescantes aguas del Atlántico son lo que necesitas para olvidarte de todo y de todos.
Perfecta si buscas: huir de las aglomeraciones… y de la música machacona de los chiringuitos de playa.
Coll Baix (Mallorca)
Para acercarte a esta playa, incluso después de dejar el coche en el refugio más cercano, tendrás que caminar unos 20 minutos. Pero ya entre los pinos empezarás a vislumbrar un pequeño spoiler de lo que te espera abajo: una preciosa playa virgen rodeada de acantilados.
Perfecta si buscas: alejarte de las playas más masificadas y volver a lo natural.
El Torn (L’Hospitalet de L’Infant, Tarragona)
Al llegar a esta playa de Tarragona, un cartel deja claro lo que no vas a encontrar: “¡Ni bañadores, ni perros, ni mirones!”. Genial. ¿Y lo que sí? Dunas, aguas transparentes, vegetación, un chiringuito e incluso un camping naturista.
Perfecta si buscas: espacio suficiente para dejar una buena distancia entre tu toalla y las de los demás bañistas.
Las Gaviotas (Tenerife)
Una calita de arena negra que desaparece cuando sube la marea… ¿puede tener más encanto? Esta playa, donde el bañador es opcional, es una de las que siguen eligiendo los tinerfeños. ¡Por algo será!
Perfecta si buscas: un lugar apartado donde descubrir el lado más relajado de Tenerife.
¿Bueno, qué? ¿Te animas? Por opciones de playas paradisíacas no será… Si todavía te da un poco de reparo, los expertos recomiendan que empieces por desnudarte dentro de casa. Por un lado, irás acostumbrándote a la sensación de no llevar ropa… por otro le harás un favor al medioambiente bajando un poquito el aire acondicionado, que no te hará tanta falta. Otra opción es acercarte a una de las playas menos concurridas, o ir fuera de temporada (un martes de septiembre, por ejemplo), para que no te dé tanto corte de primeras. Pero tenemos que insistir, nada más probarlo, te darás cuenta de que el bañador es completamente prescindible.