Pocos vínculos son tan fuertes (o complicados) como los que hay entre hermanas.
En su nuevo libro titulado Sisters, la fotógrafa Sophie Harris-Taylor plasma esa relación especial que une a hermanas de todas las edades. Harris-Taylor empezó a tomar las fotos hace dos años en Londres y sus alrededores. En un principio aparecían casi 80 personas, pero en el libro tuvo que reducir a 42.
A cada foto le acompaña una breve entrevista con las hermanas en cuestión preparada por la periodista Emma Finamore. En algunos casos hablan de los momentos más tensos de su relación (discusiones cuando eran niñas y compartían habitación, épocas de celos...), pero, pese a ello, todas coinciden en que el vínculo no se rompió.
"Probablemente estoy más contenta y cómoda en su compañía que con cualquier otra persona", dice Flo, una de las participantes, sobre su hermana mayor.
En una entrevista con la edición estadounidense del HuffPost, la fotógrafa asegura que la idea del libro le vino por su hermana y su relación con ella, un asunto que —según admite— siguen trabajando.
"Durante años, sentí la presión de cumplir y tener un tipo de relación con mi hermana que por diversas razones no me parecía natural. Como sucede en todas las relaciones, cambió y desde hace poco estamos más en contacto. Jamás cerraría esa puerta", reconoce.
Descubre a continuación varios fragmentos del libro, que está disponible en Hoxton Mini Press.
Anna (28) y Kate (37) Sophie Harris-Taylor A estas hermanas las separan casi 10 años de edad y ahora también la distancia: Kate vive en Estados Unidos y Anna, en Londres. En su infancia, Anna iba siempre entre algodones y no se separaba de sus padres, mientras que Kate era más independiente, la oveja negra de la familia. Actualmente Anna es la más sociable y a Kate le cuesta más encajar. Las escasas veces que logran reunirse y pasar algo de tiempo juntas es todo muy intenso, ya que lo valoran mucho más. Kate: "Tengo envidia, pero en el buen sentido. Anna tiene muchos talentos y es preciosa. Tengo celos de que sea más alta que yo y de que tenga más pecas". Anna: "A mí me pasa lo mismo con los celos porque Kate es más atractiva, tiene más talento, es más inteligente y es la triunfadora de la familia".
Freya (11) y Georgia (16) Sophie Harris-Taylor Como les sucede a muchas hermanas de su edad, estas tienen una relación de amor-odio. Freya suele coger sin permiso la ropa de su hermana mayor y cuando esta se trae a sus amigos a casa, la pequeña no quiere perderse la diversión, y así empiezan muchas discusiones. Sus dormitorios son habitaciones contiguas, así que hablan a menudo y se pintan las uñas juntas. Cuando Georgia no está en casa, se mantienen en contacto por Instagram y Freya echa de menos tener a alguien con quien hablar en el coche. Georgia: "Siempre quise tener una hermana pequeña y no paraba de suplicarle a mi madre: 'Mamá, porfa, porfa, ten otra niña'".
Anne (62) y Meng (61) Sophie Harris-Taylor Cuando crecían en Malasia, Anne era una rebelde que llevaba minifalda con bragas a juego, como su heroína, la modelo, cantante y actriz inglesa Twiggy. Iba correteando por ahí con una panda de chicos, montando encima de terneros, haciendo catapultas y pistolas de juguete, mientras Meng se quedaba en casa portándose bien. Esa vena rebelde de Anne hizo que la mandaran a un internado de estilo inglés, evitando así las tareas del hogar de las que se tuvo que encargar Meng, educada según el sistema chino. Sus contrastes se acentuaron conforme se hicieron adultas, pero ahora tienen una relación más cercana pese a las diferencias. Meng: "Siempre tuve celos de ella". Anne: "Pues yo nunca tuve celos de ti".
Flo (20), Millie (16), Bea (6), Oki (11), Clara (15) y Cecily (8) Sophie Harris-Taylor Este multitudinario grupo de hermanas (además de tres hermanos para un total de nueve hijos) cuenta con grupos más pequeños en su interior. Como suele ocurrir, las dos más pequeñas son amigas íntimas y las adolescentes hacen piña. Flo y Oki se denominan a sí mismas 'la resistencia' por ser las que han superado la barrera de la edad entre pequeñas y mayores. Al mismo tiempo, Flo respalda a todas las demás por ser la hermana mayor. Como música que es, pasa largos periodos fuera de casa, algo que puede resultar duro: le duele perderse cómo crece la pequeña y a todas les gustaría verla más a menudo. Bea: "Yo tendré siete hijos, tres perros, un gato, dos peces y un hámster, aunque puede que también adopte a algunos niños".
Rachel (27) y Michelle (31) Sophie Harris-Taylor Aunque ambas son bastante calladas, Michelle y Rachel hablan todos los días (a veces a todas horas) por FaceTime, SMS, Whatsapp o Instagram. Ambas viven ahora con sus maridos, pero siguen relacionándose mucho y les encanta viajar juntas. Sacan a relucir un viaje alocado que hicieron a Las Vegas o la vez que estuvieron en Ibiza y volvieron de una playa diminuta, en un día abrasador, con el pelo largo y encrespado del mar y el sol, sin parar de reírse. Michelle: "Cuando mi marido y yo hablamos de tener hijos, él solo quiere tener chicos, pero dice que tampoco le importaría tener una niña. Yo le respondo: 'No, tendrías que tener más de una, porque toda niña necesita una hermana".
Grace (17) y Jessie (8 meses) Sophie Harris-Taylor Esta de aquí es una relación muy reciente: Jessie solo tiene ocho meses. Grace fue hija única hasta hace tres años, cuando nació su hermano pequeño (el hermano mayor de Jessie). Grace considera que así ha podido disfrutar de lo mejor de ambos mundos: ahora tiene un hermano y una hermana y jamás tendrá que discutir con ellos por los juguetes. Piensa que su hermano es más como ella, mientras que Jessie es más tranquila. Grace: "Pero es demasiado joven, aún no tiene una personalidad definida".
Clare (55) y Juliet (60) Sophie Harris-Taylor Estas hermanas llevan vidas muy diferentes. Clare ha luchado para ser independiente pese a su discapacidad, mientras que Juliet ha tenido que mantener a toda la familia (así lo ve ella, al menos), incluidas otras dos hermanas. Clare fue internada cuando tenía siete años y echaba muchísimo de menos su hogar, aunque conservan recuerdos de la infancia juntas, como cuando sacaban a pasear a su muñequita Pixie en un carrito azul o cuando iban a la tienda de la esquina a comprar helados. Juliet admira la fortaleza de Clare, aunque no siempre le coja el teléfono. Clare: "Eres muy amable y servicial". Juliet: "Pensaba que ibas a decir: 'Es un vejestorio". Clare: "Cállate".
Mimi (4) y Coco (9) Sophie Harris-Taylor Aunque discutan mucho a la hora de compartir y a veces se interrumpan cuando están jugando con sus respectivos amigos, Mimi y Coco son muy buenas amigas. De hecho, así es como hacen las paces tras reñir: Mimi le pide a Coco que vuelvan a ser amigas. Les encanta compartir dormitorio porque por la noche pueden hacer trastadas, charlar hasta la madrugada o seguir dando brincos. Mimi también se mete en la cama de Coco cuando tiene pesadillas con el monstruo de las escaleras. Coco: "Le gusta ser igual que yo". Mimi: "A veces llamo 'Mimi' a Coco".
Sam (46) y Vicky (45) Sophie Harris-Taylor Estas hermanas comparten signo del zodíaco, pero tienen personalidades completamente distintas. Vicky es más alocada y llora por cualquier tontería, mientras que Sam suele ocultar sus emociones, salvo cuando era adolescente y discutía con su padre (ella siempre quería tener la última palabra) o cuando el verano pasado le tiró una bebida en la cara a Vicky. Ambas trabajan en recursos humanos, así que quizás sean más parecidas de lo que creen. Vicky: "Hemos estado hablando de mudarnos de Londres, pero no sé si quiero, porque no estaría cerca de ella y sería extraño para mí". Sam: "Acabaremos juntas en una residencia de ancianos".
Rochelle (25) y Sabrina (27) Sophie Harris-Taylor Como dos camaleones, estas dos hermanas son capaces de adaptarse sin problemas a la vida social de la otra, independientemente de que Sabrina se describa como una mujer normal y corriente (pese a que era la más alocada de las dos cuando eran más jóvenes) y Rochelle, que es actriz, sea más presumida. Cuando sus padres se divorciaron (una experiencia traumática para ellas, ya que parecían una familia perfecta de película) vivieron separadas durante varios años, pero quedaban todos los lunes en el Windsor Pub de Paddington (Londres) para mantener intacta su relación de hermanas. Rochelle: "Quedábamos todos los lunes, literalmente, para poner nuestros asuntos en orden, ponernos al día, quejarnos, echar unos lloros y hacer que esa semana valiera la pena".
Anaya (11), Kianna (4), Rhianne (14) y Sienna (6) Sophie Harris-Taylor Las más dos jóvenes de este grupo se autodenominan "contrarias": a Sienna le gustan más los coches, jugar a la Xbox y trepar árboles, en contraste con Kianna. Con otros cuatro hermanos varones, Rhianne es la hermana mediana. Ni a ella ni a Anaya les hace mucha ilusión compartir cuarto, salvo cuando no pueden dormir por la noche. Rhianne: "A mí no me gusta ni el queso ni el tomate, pero a todas las demás, sí".
Zita (10) y Unity (12) Sophie Harris-Taylor Unity y Zita disfrutan estando la una con la otra. Una hermana es alguien con quien puedes hablar, pero también alguien a quien gastar bromas. Unity se siente responsable de proteger a su hermana pequeña, aunque estén con amigos, pero le molesta muchísimo que su hermana pequeña copie lo que hace. Unity es la más tranquila de las dos y Zita es la más escandalosa (al menos en público), pero les gusta la misma música, y los mismos juguetes, que no tienen problema en compartir. Les encantan las montañas rusas, compartir la tensión de los acelerones y las bajadas. También disfrutan cuando discuten, siempre y cuando no se alargue mucho. Unity: "A veces, si estoy enfadada, puedo hablarle muy muy deprisa porque ella me entiende".
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.