Una moneda de 50 céntimos española con error de acuñación dispara repentinamente su valor
La numismática no sólo es una afición muy celebrada entre los coleccionistas y los curiosos, también puede ser un buen negocio.
La numismática no sólo es una afición muy celebrada entre los coleccionistas y los curiosos, también puede ser un buen negocio económico. Aunque las monedas de céntimos en muchas ocasiones se desprecian, existen algunas en particular que pueden hacer ganar un buen pellizco si se venden debido a que están altamente valoradas en estos mercados.
Las monedas pueden llamar la atención de los coleccionistas por diversas razones: la antigüedad, errores de fabricación o formar parte de ediciones limitadas. Esto es lo que ocurre con esta moneda de 50 céntimos que, a raíz de sus características especiales, se ha convertido en una pieza muy codiciada.
Entre ellas destaca la moneda de 50 céntimos de España del año 2002 por ser una de las primeras emitidas en el país tras la introducción del euro. Y su valor en el mercado asciende hasta los 14,90 euros, según el medio Okdiario.
Esto refleja tanto la importancia histórica de la transición a la moneda única europea como los errores de acuñación que la hacen aún más valiosa para los coleccionistas.
A esta, sin embargo, la supera en valro la moneda de 50 céntimos de Mónaco del año 2004, una de las más codiciadas y valiosas. Con una tirada extremadamente limitada y la exclusividad inherente al principado de Mónaco en el mercado numismático, esta pieza se cotiza a un valor de 85 euros, según el mismo medio.