Un chantaje detiene el mayor pozo petrolero de Repsol en el norte de África

Un chantaje detiene el mayor pozo petrolero de Repsol en el norte de África

Una decisión que puede poner en jaque al mercado internacional de crudo.

Imagen de archivo del yacimiento petrolífero de El-Sharara, en Libia.Benjamin Lowy

El yacimiento libio de Sharara, el mayor pozo petrolífero que se encuentra en el norte de África y que gestiona un consorcio internacional en el que participa la española Repsol, ha vuelto a suspender la extracción de crudo, al menos parcialmente, por motivos que no están del todo claros pero que, según diversos medios, apuntan a un "chantaje político".

Este cierre ha reducido la producción en 30.000 barriles diarios, hasta dejarla en 230.000 barriles al día, lo que podría tener implicaciones graves en el mercado global de petróleo.

Los trabajadores del conglomerado internacional que explota el yacimiento, compuesto por la Corporación Nacional Libia de Petróleo (NOC), la francesa TotalEnergies, la española Repsol, la austriaca OMV y la noruega Equinor, tomaron la decisión de reducir la producción de petróleo después de recibir órdenes de proceder con un cierre parcial, aunque aún no se han especificado los motivos precisos detrás decisión.

El líder de la región libia de Fezán, Bashir Sheikh, aseguraba este pasado domingo en un vídeo publicado en las redes sociales, que habría sido el hijo del mariscal Jalifa Haftar, Sadam Haftar, el que habría ordenado el bloqueo parcial del yacimiento de Sharara como parte de una estrategia de presión política, lo que refleja la compleja dinámica de poder que se ha establecido en Libia entre las diferentes facciones del país, que usa el petróleo como herramienta de coacción en el complejo juego político libio.

El bloqueo del yacimiento de Sharara no es un hecho aislado, aunque sí es la primera vez que la inestabilidad política libia afecta a la producción de petróleo. En enero, sin ir más lejos, también tuvo que detener su producción por culpa de las protestas que paralizaron la extracción de petróleo hasta que la Corporación Nacional Libia de Petróleo (NOC) y el Ejercito Nacional Libio, de Haftar, mediaron para su reapertura.

La producción de petróleo en Libia ha sido inestable desde la muerte de Muamar Gadafi en 2011, cuando el país producía cerca de 1,8 millones de barriles cada día, antes de que  la guerra civil libia se anunciase una drástica reducción de 100.000 diarios. Aunque la producción se estabilizó en los últimos meses alrededor de los 1,2 millones de barriles, la situación sigue siendo volátil, con bloqueos ocasionales en varios yacimientos.

El cierre parcial del yacimiento de Sharara podría tener un impacto más que significativo en el mercado global de petróleo. La reducción de la oferta de crudo con origen en uno de los principales productores del Magreb, no solo podría influir en el precio del barril de petróleo, sino que también puede tensionar aún más un mercado que ya es inestable.