Este es el precio de las cabinas con vistas idílicas para teletrabajar
'Glamping' para nómadas digitales... en California.
El teletrabajo, popular en España durante la pandemia y que ahora parece en retroceso, no solo permite a las personas trabajar desde la comodidad de sus casas sino que también se presenta como una buena opción para facilitar la conciliación familiar.
Asimismo, el auge del teletrabajo ha permitido la aparición de un tipo de profesional que usa las nuevas tecnologías para trabajar de forma remota en lugar de hacerlo de forma presencial en una oficina. Son los nómadas digitales y, por lo general, trabajan desde cualquier parte del mundo y tienen la libertad de elegir dónde y cómo hacerlo, pero siempre con una buena conexión a Internet.
En este contexto, el británico Charlie Hammond decidió instalarse en Los Ángeles y poner en marcha un innovador proyecto llamado Find Sanctuary, que ofrece una solución para los que buscan un espacio de trabajo único mientras disfrutan de la naturaleza en un entorno privilegiado: el valle de Big Bear, en California, tal como informa Economía Digital.
Son 40 cabañas premium, equipadas con wifi de alta velocidad, diseñadas especialmente para nómadas digitales, profesionales y emprendedores que buscan un lugar tranquilo y cómodo para teletrabajar, con privacidad y todas las comodidades.
Cada cabina Find Sanctuary está cuidadosamente diseñada y equipada con tecnología de vanguardia, mobiliario ergonómico y una estudiada iluminación. En el interior, de 30 metros cuadrados, se encuentra un escritorio de madera con vistas panorámicas, una chimenea de leña y una cama de gran tamaño; en el exterior, una terraza de buen tamaño con una bañera hundida.
"Find Sanctuary nació por necesidad", explica el creador de este singular espacio de trabajo a la revista de arquitectura Dezeen, " y ha sido una herramienta complementaria para bregar mis propios problemas con la salud mental".
"Las cabañas ofrecen un entorno incomparable tanto para teletrabajar como para disfrutar, algo que permite a los huéspedes que las ocupan sumergirse en la naturaleza mientras siguen conectados con el mundo moderno", explica la compañía en su web.
Para disfrutar de una de las cabañas del proyecto de Charlie Hammond, eso sí, hace falta tener unos buenos ingresos porque la estancia cuesta 400 dólares cada noche, nada más y nada menos.