Marruecos asesta un golpe a Canarias con un producto clave
La industria avícola de Canarias enfrenta nuevos desafíos y oportunidades tras la apertura de la exportación marroquí.
En un giro inesperado para el sector avícola de Canarias, la reciente autorización de la Unión Europea para la importación de carne de pollo y pavo desde Marruecos ha generado un ambiente de incertidumbre. Con una producción anual estimada en 20.000 toneladas y un consumo que supera la media nacional según los datos arrojados por Maspalomas24h, el archipiélago se ha posicionado como un mercado clave en esta industria.
Sin embargo, la competitividad se ve amenazada por la entrada de productos marroquíes, cuyo precio inferior podría inclinar la balanza a su favor. En 2022, Marruecos exportó 400.000 toneladas de carne de pollo, valoradas en 500 millones de euros, a mercados primordiales como la Unión Europea y Arabia Saudí. Esta expansión representa tanto un desafío como una ventana de oportunidad para los productores locales y europeos que buscan importar a precios más accesibles.
La línea marítima de Tarfaya a Gran Canaria, que también abastece de frutas y hortalizas, podría convertirse en una vía para la carne de pollo, intensificando la competencia. A pesar de las críticas por las diferencias en los estándares de calidad y seguridad alimentaria, el gobierno marroquí invierte en la modernización de su industria avícola, que crece a un ritmo anual del 5%. Los principales mercados de exportación para el pollo marroquí son la Unión Europea, Arabia Saudí y los países del Consejo de Cooperación del Golfo, y se espera que las exportaciones de pollo marroquí continúen aumentando en los próximos años.
Mientras tanto, en el ámbito local, Cruzbe, el mayor productor de I+D+I de pollo en Canarias, mantiene un capital de 13 millones de euros. Mercadona, por su parte, incrementó la compra de huevo local en un 25% según datos del mismo medio.