India alucina con el submarino verde español
Navantia aspira a llevarse un proyecto valorado en más de 4.500 millones de euros para la construcción de seis unidades del submarino español de moda.
Navantia, principal contratista de la Armada española, quiere convencer al gobierno de la India para que le asigne la construcción de los seis submarinos convencionales incluidos en un proyecto en el que se estima que invertirá 4.555 millones de euros y al que aspira el astillero español junto a la constructora Larsen & Toubro, con su modelo S-81.
"Hemos presentado nuestro submarino como 'el submarino verde', es el submarino que marca la diferencia. Esto tiene muchas ventajas, sobre todo que es más seguro, más eficiente, y va a tener un ciclo de vida más seguro", aseguraba el pasado viernes la secretaria de Estado de Defensa de España, Amparo Valcarce, de visita oficial a la India que coincide con el viaje de empresas españolas del sector de Defensa al país asiático.
El mayor rival de Navantia para hacerse con la oferta del Gobierno indio es la empresa alemana ThyssenKrupp Marine Systems (TKMS) y también las dudas que surgen acerca el proyecto de la naviera española y, concretamente, a la exigencia de que los submarinos cuenten con una Propulsión Independiente del Aire (AIP en inglés) probada en el mar para que el sumergible pueda operar sin salir a la superficie, un aspecto que dejó a la mayoría de los fabricantes extranjeros fuera de la carrera, incluido Navantia.
"Nosotros les hemos dado plenas garantías. La AIP del submarino que presentan Navantia y Larsen & Toubro es la AIP más moderna y avanzada del mercado, es de tercera generación. No hay ninguna otra con estas cualidades", destacó Amparo Valcarce.
Además de este acuerdo, la secretaria de Estado de Defensa española también resaltó en una reunión con su contraparte india el "papel muy importante" que juega el portaaviones Juan Carlos I, buque insignia de la Armada española y que tiene posibilidades de entrar en futuras licitaciones que tramite el Gobierno de la India, inmersa en la renovación de gran parte de su equipamiento militar y en la que pretende invertir más de 26.000 millones de dólares en los próximos años. La mayoría de esta inversión se impulsará a través de la iniciativa Hecho en India, que promueve el país asiático para nacionalizar su armamento, que hasta ahora importaba en su mayoría.
Airbus se hizo en 2021 con un suculento contrato para construir 56 aviones militares C295 a la India, 16 de los cuales se fabrican en la planta que el grupo europeo tiene en Sevilla, mientras que el resto lo harán en una línea de ensamblaje en el país asiático que se creará en asociación con el grupo local Tata. La India recibió la primera de esas aeronaves fabricadas en Sevilla el pasado septiembre, lo que para Valcarce supone la carta de presentación ideal de España de cara al futuro contrato al que aspira Navantia.