Por favor, habilita JavaScript para ver los comentarios de Disqus.
Esto es lo que significa si tienes "amnesia selectiva" según los psicólogos

Esto es lo que significa si tienes "amnesia selectiva" según los psicólogos

Es muy positivo.

Pérdida de memoriaGetty Images

Seguro que en muchas ocasiones has notado que se te olvidan ciertas cosas que creías aprendidas o detalles que, aunque son irrelevantes, en un momento dado podrían ser útiles: ese trayecto, la matricula del coche de una persona cercana, el precio de una prenda de ropa en la tienda, etc.

Evidentemente, nuestro cerebro no nos permite recordar todo lo que pasa delante de nuestros ojos, ni toda la información que nos llega a través de los sentidos. De hecho, a todos nos ha pasado alguna -o muchas- veces esa sensación de ir a la cocina y pensar: '¿Para qué había venido?' Pues bien, esto es muy normal, tiene una explicación psicológica y tiene un sentido práctico.

Para comenzar explicando esto, hay que tener clara una cosa, explicada hace muchos años por la psicología, concretamente por el psicólogo alemán del siglo XIX, Hermann Ebbinghaus, quien sostenía que la mayor parte de las personas olvidan los detalles de la información nueva muy rápido, aunque esto disminuye con la edad.

Olvido selectivo

Y aquí entramos en el olvido selectivo. Como su propio nombre indica, hace referencia a los detalles e la información que nuestro cerebro olvida para permitirnos quedarnos con los recuerdos y la información verdaderamente útil, ya que de lo contrario, sería imposible.

Para evitarlo, el mejor consejo es de sentido común, pero no todo el mundo lo hace: prestar atención desde el principio, ya que de esa forma, los recuerdos se fortalecen gracias a la actividad entre las células cerebrales (neuronas).

Pero este  mecanismo también nos sirve para olvidar todos aquellos detalles intranscendentes del día a día. Sin embargo es importante tener en cuenta que nuestro cerebro está en constante proceso de creación de nuevas conexiones que nos permitan estar preparados para cambiar puntualmente una situación habitual.

Por ejemplo, si siempre coges la misma línea de metro para ir al trabajo y un día esa línea permanece cerrada por obras, gracias a las nuevas conexiones adicionales del cerebro, tu cabeza (y memoria) podrá adaptarse para cambiar durante ese día la rutina interiorizada y memorizada que tienes.

Todo esto es positivo, ya que evolutivamente, es bueno olvidar recuerdos viejos para interiorizar y asimilar información nueva.