Dos nuevos enemigos preparan una de las peores cosechas del siglo para la naranja española de 2025
Los agricultores urgen medidas para proteger la producción y estabilizar los precios.
La campaña citrícola de 2024-2025 en la Comunitat Valenciana se perfila como una de las más desafiantes del siglo debido a una combinación de factores climáticos adversos y problemas en el mercado. Según un reciente informe de la Unió Llauradora, se espera que la cosecha de cítricos sea un 3% superior a la del año pasado, pero aún así será la tercera con menor producción de este siglo.
La sequía prolongada y las condiciones meteorológicas extremas han sido identificadas como las principales causas de la baja producción. Desde la floración hasta el engorde de los frutos, las elevadísimas temperaturas y la falta de lluvias han impactado gravemente en los cultivos. Además, el arbolado envejecido, el abandono de tierras y el aumento de plagas complican aún más la situación.
Las previsiones apuntan a una producción total de aproximadamente 2,88 millones de toneladas de cítricos, un incremento ligero en comparación con la cosecha más baja del siglo XXI, pero aún así una disminución del 10% respecto a la media de los últimos 25 años. Esta es la sexta campaña consecutiva por debajo de la media productiva del último cuarto de siglo.
El consumo de cítricos en los hogares también muestra una tendencia a la baja. En el último año, se observó una disminución del 7,5% respecto al año anterior y un 21% sobre la media de los últimos cinco años. Aunque el consumo de mandarinas ha tenido un ligero repunte, se necesita una mayor promoción para recuperar las cifras de consumo anteriores.
Las importaciones de cítricos siguen en aumento, con un incremento del 6,3% en el primer cuatrimestre de 2024 respecto al año anterior. Egipto, Turquía y Marruecos dominan las exportaciones a España, lo que plantea un desafío para los productores locales. La Unió Llauradora propone medidas para fortalecer los protocolos de importación y proteger la sanidad vegetal.
Carles Peris, secretario general de La Unió, advierte que la combinación de factores climáticos y problemas estructurales podría traducirse en precios inestables y ajustados para los productores. La organización aboga por una política de protección más robusta y por mantener una demanda estable de cítricos para ayudar a mejorar la situación económica de los agricultores.