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Aprovecha que su compañera se va de vacaciones de Navidad y desvalija su cajonera: el Banco Santander toma la medida más extrema

Aprovecha que su compañera se va de vacaciones de Navidad y desvalija su cajonera: el Banco Santander toma la medida más extrema

La defensa también intentó vincular el despido con problemas de salud mental que había sufrido la trabajadora en el pasado, como episodios de ansiedad y depresión.

Puerta de entrada de una sucursal del Banco Santander en Madrid.John Milner

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha confirmado el despido disciplinario de una trabajadora del Banco Santander, acusada de sustraer pertenencias personales de una compañera mientras estaba de vacaciones en Navidad. Los hechos ocurrieron en una oficina del distrito de Ciudad Lineal, donde las cámaras de seguridad pudieron captar a la empleada accediendo a la cajonera de su compañera en su ausencia.

El incidente, según Economist & Juristtuvo lugar el 27 de diciembre de 2022, cuando la trabajadora accedió a la cajonera de su compañera para llevarse sin permiso algunos de los objetos que guardaba, como una agenda, un cuaderno o un marcapáginas. Según la investigación interna realizada por el Banco Santander, ella fue la única persona que se acercó al escritorio de su compañera durante sus vacaciones.

En su resolución, el TSJM desestima el recurso presentado por la trabajadora despedida y concluye que los hechos, probados, justificaban la decisión el banco. La sentencia señala, además, que la conducta de la exempleada constituye una grave violación de la buena fe contractual, principio esencial en el ámbito laboral, especialmente en el sector bancario.

Aunque la defensa apeló a la proporcionalidad de la sanción, argumentando el bajo valor económico de los objetos sustraídos, el tribunal consideró que la naturaleza de la acción era suficiente para justificar el despido. "No es necesario que el empleador sufra una pérdida económica directa para considerar grave esta conducta", señala el fallo.

La defensa también intentó vincular el despido con problemas de salud mental que había sufrido la trabajadora en el pasado, como episodios de ansiedad y depresión. Sin embargo, el tribunal concluyó que no había pruebas suficientes para demostrar que estas circunstancias influyeran en la decisión del banco.