Nadal tras su último partido: "Si fuera capitán no me elegiría para jugar"
El tenista ha confesado que "está siendo un día muy emotivo" para él.
Rafa Nadal ha lamentado la derrota cosechada este martes frente al neerlandés Van de Zandschulp (6-4 y 6-4) en la Copa Davis. El manacorí ha confesado que está siendo un "día muy emotivo porque podría ser" su último partido como profesional si España no supera la eliminatoria del torneo en Málaga.
"Es un día emotivo. Sabía que podía ser mi último partido, los momentos previos han sido difíciles de gestionar, pero he intentado hacerlo de la mejor manera posible. A veces es difícil, pero no puedo agradecer lo suficiente a toda la gente que me ha ayudado siempre", ha afirmado en una conferencia de prensa tras el partido.
Nadal ha afirmado que "no lo siento". "Esto es deporte, lo he intentado y uno no puede controlar el nivel que tiene. Puede controlar la actitud, energía y determinación y eso no me ha fallado. Solo que no he encontrado el nivel necesario para competir. Quizá he estado mejor entrenando que en la competición", ha admitido.
"El capitán toma las decisiones que considera mejores. Yo dije que me descartara si no me veía capacitado para ganar. He entrenado bien para ganar, pero en competición no he podido rendir lo que me hubiera gustado. Ojalá haya otra oportunidad pero estamos en una situación límite, y más en esta pista, que es muy rápida. Ojalá haya otro partido, pero yo pondría otro jugador si fuera capitán, aunque a mí no me corresponde esa decisión. Yo no tengo ese poder de decisión", confesó.
Nadal reconoció que, ante la posibilidad de disputar su último partido, tuvo "una mezcla de emociones" que hubo que gestionar.
"Ha habido un cúmulo de circunstancias que hace que todo vaya muy rápido y que sea difícil estar en el control del partido, en general. No tengo los automatismos de cuando uno está en competición. La pista es más rápida y evidentemente no tenía la agilidad mental para tomar las decisiones sin pensar", apuntó.
Ante la posible despedida, Nadal recibió un cariño especial de la afición española que llenó el Martín Carpena y no dejó de recibir aplausos y gritos de ánimo durante el encuentro.
"Este ambiente lo viviría todos los días si pudiera, pero una cosa es lo que me apetezca a mí y otra lo que crea que es mejor para el equipo. Las cosas que a uno le apetecen a veces no son las mejores. Hoy no se sabía lo que era mejor para el equipo. Estaba la incógnita de cómo respondería en competición, ya que no había datos en las últimas semanas. En entrenamientos había funcionado bien, pero después hay que competir", manifestó.
"Lo que digo no es porque tenga ganas o no. Yo voy a trabajar al máximo para ser elegible si tengo que jugar una cosa u otra, el individual o los dobles, pero visto lo que he visto de nivel mío en competición, comparado a como estaba entrenando, si fuera capitán no me elegiría a mí. Dicho esto, si ganamos y me piden el viernes que salga a jugar, saldré con la máxima ilusión", concluyó.